Todas las personas que han pasado por la situación de verse obligados a desplazarse en silla de ruedas o han tenido un contacto cercano han experimentado la dificultad de tener que adaptarse al entorno una vez salidos del hospital. Los espacios no son en la mayoría de los casos accesibles y también sabemos que en los hospitales no se aprenden muy bien las habilidades necesarias para sortear los obstáculos. Tanto por la situación anímica inicial como porque el hospital no es un reflejo de lo que nos vamos a encontrar fuera, en el “mundo real”.
|
etiquetas: discapacidad , independencia