La Diputación Foral de Álava, en una resolución adoptada en el otoño de 2008, declaró falsos los llamados “grafitos excepcionales” , hallados en el yacimiento de Iruña-Veleia durante las campañas de 2005 y 2006, y decidió retirar el derecho de excavación a la empresa Lurmen S.L., para posteriormente entablar procedimiento judicial. El caso ha estado en fase de instrucción durante nueve años; posee el triste récord de ser la causa abierta más antigua de nuestro país.