Los gigantes tecnológicos estadounidenses deberían asumir parte de los costes de desarrollo de las redes de telecomunicaciones europeas, ya que las ellos también las utilizan en gran medida, según opinan 11 empresas de telecomunicaciones europeas (Telefónica, Vodafone, Orange, KPN, BT Group, Telekom Austria, Vivacom, Proximus, Telenor, Altice Portugal, Telia Company y Swisscom), que han emitido una carta conjunta.