Fueron estrellas, artistas eternas que dejaron su huella. Las vidas de artistas como Billie Holiday o Nina Simone, Aretha Franklin o Tina Turner están unidas a los abusos, los que recibieron mujeres afroamericanas que vivieron el racismo más salvaje y el machismo más intenso. Sus dramas marcaron sus canciones, llegaron a lo más alto, pero tras el éxito se esconden historias de miseria, miedo y dolor. Maridos violentos, controladores o estafadores, a veces todo a vez, marcaron las vidas de algunas de las estrellas más brillantes del firmamento.