'Alabí, alabá, alabín, bom-bá', 'Ra, ra, ra', 'alirón'. Cánticos deportivos (más bien viejunos, de tiempos de Pepe el Hincha, la verdad) que pueden sonar a árabe... inventado. Pero no. Se trata de expresiones populares, originarias del ámbito de los juegos infantiles, que efectivamente proceden del árabe. En concreto, del dialecto andalusí, la forma de habla popular de la que proceden el grueso de los arabismos de origen coloquial incrustados en las lenguas castellana y catalana.