PORTADAS DE LA MAÑANA // 2 OCTUBRE 2028:
The Times: "La IA destruye 1300 millones de empleos en el último mes"
The Independent: "El hombre llega a marte"
The Telegraph: "Israel descarga 100 bombas nucleares sobre La Meca"
The Post: "Hallada la cura total para el cáncer"
The Sun: "La NASA confirma oficialmente contactos con una civilización extraterrestre"
The Economist: "Putin ordena la invasión de Europa"
The Guardian: ""El colisionador de hadrones detecta pruebas concluyentes de la existencia de universos paralelos"
The Objective: "La concuñada del podólogo de Begoña Gómez eructa en una comunión laica"
Escribo esto más por leer los comentarios que por contar mis experiencias.
Para los que no estén familiarizados con el término pongo un par de enlaces:
www.espinof.com/diccionario-cine-television/la-suspension-de-la-incred
es.wikipedia.org/wiki/Suspensión_de_la_incredulidad
Acabo de ver la enésima escena donde electrocutan a alguien con un suelo (bañera, fregadero, etc) mojado y un cable vivo en el líquido.
He sido electricista antes de informático y me revienta ver algo que sería imposible en cualquier instalación donde haya un diferencial. Y estamos hartos de ver tostadoras matando a alguien en una bañera, lo puedo aceptar en pelis de los 40 o así pero me ofenden ese tipo de escenas en películas del siglo XXI.
No me cuesta creerme la chalaura de la araña radiactiva de Spiderman o las garras de adamantium the Wolverine, es simple ficción y listo.
Bueno, solo una reflexión de una noche de insomnio.
Emitió Telemadrid una información sobre los festejos taurinos en España donde se hacía eco de las estadísticas publicadas por ANOET, pero las manipulaba para indicar que la comparativa era respecto al año anterior, cuando en realidad era respecto a 2019. Así, cuando decía que en 2023 había habido 159 festejos taurinos más que en 2022, en realidad había habido 43 menos.
Nunca he escrito un artículo en menéame. Nunca he tenido motivos de tanto peso: un genocidio. Mañana 27 de septiembre hay convocada una huelga general en España. Se solicitan medidas de presión contra Israel para intentar parar la masacre del pueblo Palestino.
La convocatoria ha sido un desastre. Las organizaciones convocantes tienen poco peso. La publicidad ha sido casi nula. Parece difícil que haya, ya no un seguimiento masivo, sino siquiera suficiente para evitar la sonrisa taimada de los exhortados.
Aún así, yo voy a hacer huelga. Voy a palmar pasta. Voy a hacer el ridículo ante mis compañeros pues sospecho que nadie más la secundará. Voy a molestar a mi empresa en contra de la cual no tengo nada. Luego iré a la manifestación convocada a exponerme a las miradas condescendientes de los transeúntes ocupados en asuntos más importantes.
Pero es que es de las pocas cosas que en casi un año de masacre voy a poder hacer para intentar pararla. Si no hago la huelga me sentiré cómplice silencioso de los asesinos. Si no escribo esto y os pido que os unáis, también.
Buenas a todos.
Para quien ni les suene mi nombre, soy Perogrullo, viejo usuario de esta red social.
Como algunos usuarios saben, últimamente he estado jugando bastante con la IA que genera música, empecé con Suno, pero me he pasado a Udio porque he descubierto la manera de realizar imitaciones sorprendentemente verosímiles de grupos existentes. Concretamente me he especializado estas tres últimas semanas en imitar al grupo La Polla Records.
¿Por qué? Pues porque debido a mi edad, es un grupo que para mi representa perfectamente un sentimiento de rabia y de asco contra ciertos aspectos de nuestra sociedad, y porque siempre me han parecido capaces de realizar una crítica social de aspecto ligero pero de bastante profundidad dentro de las posibilidades que ofrece el punk.
Tras hacer unos cuantos temas que he ido enviando a la cola de pendientes, la semana pasada hice el que creo que es mi mejor tema, 7291 Ancianos, dedicado a Isabel Díaz Ayuso, consideré que valía la pena arriesgarme a votos de spam a cambio de compartirlo, recibir algo de feedback y expresarme un poco en voz alta.
El tema fue suficientemente potente como para que fugazmente llegase a portada, y luego fuese tumbado en un ataque coordinado que le metió una docena de negativos en muy pocos minutos.
Hoy me he enterado de que a través de los artículos podía haber enviado contenido propio y haberme evitado los votos de spam, que si, que llevo aquí 13 años y sigo a por uvas, pero me siento un poco bobo después de 3 semanas enviando mis cosas.
Con todo, considero que dentro de mis posibilidades, el tema es un auténtico éxito, superando con mucho mis expectativas. En cinco días tiene
-3.200 visualuzaciones
-138 likes
-Se me ha unido un centenar de suscriptores, casi integramente desde meneame.
Para los estándares de internet es algo insignificante, pero para mi un éxito rotundo.
Ahora algunas reflexiones analizando las estadísticas una semana después:
Sin mas quedo a vuestra disposición para cualquier comentario, y aprovecho para dejar el enlace del tema en cuestión, ya que siendo sincero, me produce cierto orgullo. Para mi es como haber conseguido un superpoder el tener la capacidad de hacer temas que suenen a La Polla Records y más aún que uno me parezca que suena bien.
Aprovecho para agradecer a muchos de los meneantes que habeis ido dando vuestro apoyo.
Un saludo a todos.
Hay veces que para obtener un titular sensacionalista sobre datos no hace falta mentir, basta con dar las cifras de forma creativa. Leemos en El Debate que las fugas de presos en los traslados se han duplicado desde 2012; una variación tremenda podría pensar cualquiera, ante la que urge tomar medidas. Pero que en el artículo no aparezcan por ningún lado cual es el número de fugar que ha habido en 2023 ya induce a pensar que hay gato encerrado. Si nos vamos a este artículo de 20 Minutos que está basado en las mismas cifras de Interior suministradas a la AUGC, podemos leer que en 2023 hubo exactamente dos fugas de presos en los traslados, luego en 2012 habría una.
Leo en The Objective una noticia sobre Muface donde se asegura que su supresión aumentaría un 266%% la lista de espera de consultas y un 115% la quirúrgica. Como tengo por costumbre comprobar todo incremento porcentual que supere 100, se ve claramente que en ambos casos se ha realizado de forma errónea: en el primer caso el incremento es de 167% (227,6/85,4=2,67); y en el segundo, del 15% (19,6/17,1=1,15). Que un medio como The Objective cometa estos errores es habitual, pero resulta que en este caso la fuente es el informe "El mutualismo administrativo: modelo predictivo sobre la elección de los mutualistas y escenarios futuros" de la Universidad Complutense de Madrid, y, lo más sorprendente, en el figura el mismo error.
La noticia de estos días de la Guerra de Ucrania es que los ucranianos han ocupado unos 400 kilómetros cuadrados de territorio ruso, aprovechando la debilidad de las defensas en ese sector. Los combates prosiguen, y el área invadida podría aumentar aún un poco, aunque parece que la situación se estabiliza poco a poco. Todo muy épico, es cierto.
Sin embargo, con vuestro permiso, me pregunto yo una cosa: ¿qué más da si los ucranianos avanzan 30 o 50 kilómetros? ¿Qué pretenden? No hay objetivo estratégico alguno en esta operación, fuera de alimentar a la propaganda de los que pagan.
Con las tropas de que disponen, ¿a dónde piensan llegar y qué área pueden cubrir de manera efectiva? Porque al menos, los alemanes, en lás Árdenas de 1945, tenían la idea de empujar a los americanos contra el mar, aunque sabían de sobra que sólo una inmensa chiripa les permitiría conseguirlo. ¿Pero esta gente? ¿Qué idea tiene en la cabeza? ¿Tomar la central nuclear de Kursk? Me parece casi imposible lograrlo, pero aún así, supongamos que lo logran. ¿La van a volar? Eso ya pueden hacerlo ahora con un misil americano, y saben el coste que tendría.
Los alemanes pretendían llegar a Amberes y cortar el suministro americano. Era una idea descabellada, pero era una idea. Cosas más gordas les habían salido bien, como la conquista de Holanda en 1940. Estaban jodidos y había que intentarlo. De perdidos, pues al río. Vale. ¿Pero estos? ¿Qué plan tienen? ¿Abrir un nuevo frente para que no se lo abran? ¿Elegir el sitio?
A estas alturas ya parece más que claro que la estrategia rusa es de desgaste, y los ucranianos van y lanzan un buen puñado de tropas experimentadas a un frente que nadie sabe qué finalidad estratégica puede tener. Porque seguro que no están pensando en llegar a Moscú, ni en conquistar nada que no sean unas cuantas aldeas.
Puede que las razones sean políticas, o de algún otro tipo que me escape, pero a nivel militar la cosa no tiene sentido. Como cuando cruzaron el Dniéper y crearon una cabeza de puente al oto lado. Igual.
O como me decía el otro día un amigo: si tu fueses un soldado ucraniano y te mandasen invadir Rusia, ¿qué coño pensarías?
Pues eso.
Los humanos parimos ideas, las cuales mezclamos, cocinamos y aderezamos para crear así unas combinaciones que llamamos ideologías. Más tarde, una vez hemos creado nuestro nutriente intelectual favorito, por resultarnos sabroso o placentero, nos habituamos a consumirlo asiduamente. En el peor de los casos acabamos repitiendo una y otra vez, haciéndonos adictos a nuestro manjar y rechazando cualquier otro. Sin embargo, el camino al fanatismo no se asemeja a una especie de trastorno alimenticio, sino que se trata de algo mucho más complejo, puesto que es una relación de ida y vuelta.
Creamos nuestros sistemas de ideas y les damos vida. Actúan como un virus en nuestro software social, cuya única misión es sobrevivir, reproduciéndose sin descanso. Nosotros escribimos el libro de hechizos, pero, como en las malas obras de fantasía mágica, el papel cobra vida y empieza a darnos órdenes. Al principio de forma sutil, más tarde de forma directa. Compartimos nuestro descubrimiento y formamos una comunidad. Ahora somos los adoradores del libro y necesitamos un nombre. Creamos nuestra identidad a su alrededor y empezamos a clasificar a la humanidad entre creyentes e infieles. Por fin llega el día y una epifanía se nos revela, pues el libro ya habla de forma clara y recita unos dogmas que, al principio, pueden discutirse, pero pronto se consolidan como la base de nuestra fe. Entonces ocurre la magia final, el milagro. El libro mágico, aquel caldero en el que fuimos echando nuestras ideas y las de otros en distintas proporciones, es un ser completo que nos dicta La Verdad. Ahora él nos crea a nosotros, escribe sobre nuestra piel, nos dice cuáles son las verdades fundamentales y lo equivocados o malvados que son aquellos que las rechazan. Es entonces, justo entonces, cuando ya no necesitamos más ideas porque tenemos ideología. Somos portadores de una llama que permite iluminar al mundo y quemar a los herejes. Y lo más importante: podemos preguntarle a nuestro amigo mágico sobre cualquier cosa. Nos contestará desde su verdad incuestionable y solo necesitaremos acatar sus indicaciones para conducirnos virtuosamente.
El fanático, pues, no es otra cosa que quien se ha adscrito a una ideología, propia o ajena, hasta implicarse de tal forma que es la ideología la que le dicta a él cómo pensar. Evidentemente, las religiones tienen los ingredientes necesarios para que este fenómeno suceda, pero toda ideología puede actuar como una religión laica. En el caso de las religiones tradicionales, el creyente puede alegar que es la voluntad de una divinidad; en las religiones laicas, trata a la propia ideología como una divinidad, sorteando la evidencia de haber sido creada por los hombres al asignarle una naturaleza que es anterior o superior a su voluntad.
Cualquier tipo de ideología es capaz de adquirir sus propios fanáticos, pero voy a detenerme en señalar el caso de Milei, el personaje de moda, pues sus declaraciones muestran el ejemplo perfecto de lo que intento argumentar. Tomemos solo dos.
En 2022 protagonizó una polémica al votar en contra de un programa de tratamiento de cardiopatías congénitas en bebés. Al ser cuestionado por la razón, le bastó con respaldarse en la ideología: “Bueno, lo votamos en función del ideario liberal”. Un buen fanático no necesita más explicaciones. Si su libro sagrado dice que la intervención del Estado es siempre maligna, la regla se debe seguir pese a quien pese y tenga las consecuencias que tenga. Si algo es un pecado para nuestra fe, el tabú ha de cumplirse sin excepción. Por ello, no cabe entrar en el fondo de las consecuencias, pues nuestra ideología no puede equivocarse y es universalmente válida.
El segundo ejemplo refuerza lo expuesto. En el reciente foro de Davos se permitió afirmar, ante el estupor de los presentes, que “el fallo del mercado no existe”. Creer lo contrario es, por tanto, una herejía, y a los enemigos de la verdadera fe solo queda combatirlos. No merecen ningún tipo de argumento más. La deidad a la que adoramos no puede equivocarse. A partir de este axioma, puede interpretarse la realidad. Puede y debe. Si nuestra ideología-religión dice que el mercado debe regularlo todo y ello implica la muerte de bebés con problemas de salud, debemos aceptarlo. Olvidemos el detalle de que somos nosotros quienes creamos a los dioses, aceptemos gustosamente sacrificarnos a su voluntad. Olvidemos que fuimos nosotros quienes les dotamos de ella, quienes los imaginamos en nuestra fantasía y les supusimos la infalibilidad.
Acaba de terminar Al Rojo Vivo, y no he visto nunca una manipulación tan burda, tan clara, y no se cuanta gente se habrá dado cuenta:
Ha cortado a Page en mitad de su comparecencia, cuando estaba tratando el tema de si era planificado o no. Ha quedado solo en el aire la pregunta, sin dar a entender si quiera su opinión.
Ha dicho cada minuto mínimamente 2 veces que era planificado, para manipular a la gente.
Palabras como dar pena, como estratégico, las ha dicho (ofuscado en una pregunta) 2 o 3 veces por entrevistado u opinador.
Dedica a las opiniones del PP/VOX etc muchísimo más que a las del PNV, gente de su partido o de la coalición
Viendo ahora mismo las noticias de La Sexta, entrevistan a gente por igual de las dos opiniones, titular final, son dudas todas.
No creo que la gente se de cuenta de que esto es preparar a la población para unas elecciones hipotéticas, siendo La Sexta cadena referente de la izquierda.
Ha sido burdo (y lo sigue siendo) pero van con ello.
Año 2039.
Los tiktokers dominan el parlamento español y queman, impunes, bibliotecas, filmotecas y librerías. Colegios y universidades son, desde hace una década, meras escuelas de danza y pseudociencias, dedicadas a la generación de contenido para la red social.
Pero una guerrilla resiste en las calles repartiendo libros, películas y música "no coreografiable" y, apoyada por una parte de la sociedad, inunda las calles y finalmente da un golpe de Estado tras 5 años de dominio tiktokero. Poco a poco van cayendo ciudades.
Algunos tiktokers conseguirán escapar por la frontera o por barco. Los más conocidos formarán un gobierno en el exilio. Sus peticiones de ayuda a Francia o Rusia no sirven de nada. El planeta tiktoker abandona a su suerte a España. La persecución es atroz.
El golpe avanza y el odio contra el reguetón y la gente que se graba bailando se propaga como una epidemia por todo el país. Piras de discos de música latina son quemadas por la multitud en las calles de Madrid, Barcelona, Sevilla...
Se crea la DGSB (Dirección General contra Subnormales que Bailan) que a su vez creará las llamadas "Listas del TikTok" donde al estilo del macartismo, se busca, persigue y juzga sin garantías legales a personas que hiciesen coreografías en el pasado o que tengan reguetón en casa.
El mero hecho de haber subido un solo vídeo a TikTok puede suponer la muerte. Muchos se apresuran a borrar sus cuentas en la red social. Vecinos señalan a vecinos. Padres a hijos. Hermanos a hermanas. Se suceden interrogatorios y torturas.
Miles de inocentes son ajusticiados por el mero hecho de bailar y sus familiares vivirán con el estigma de ser hermanos, madres, hijos de un tiktoker. Los muros de los cementerios se utilizan para ejecuciones sumarias y masivas al son de Mozart o The Beatles.
Los tribunales no permiten el derecho a la defensa y se observa una especial dureza contra aquellos Tiktokers con más de 25 años y con los que hicieron lip sync. Especialmente sangrante es el ajusticiamiento de 13 mujeres, "las 13 Rosalías", cuyo único crimen fue hacer una coreo de Bad Bunny.
"Los dúos de la cebolla", "Los challenge son para el verano" y "Coreos de Sangre" surgen como emotivas puntas de lanza de la resistencia al golpe de estado ilegal.
"No bailarán" será el eslogan de los golpistas.
Se crea la Resistencia TikTokera que se reúne en abandonados polígonos industriales para celebrar asambleas de resistencia. En esas reuniones crean nuevas coreografías contra el poder establecido bailando al son de canciones que ya han sido prohibidas por la ley.
Millones de tiktokers se suman en Europa o EEUU a sus protestas, replicando sus bailes. Su protesta es un éxito en internet, pero el baile no tiene el poder de cambiar nada, solo consiguen likes y viralidad. Los tiktokers siguen siendo ajusticiados o encarcelados.
En Euskadi surge un grupo de danza terrorista que lucha por la independencia y el regreso del TikTok haciendo sesiones de Aurresku contra policías, guardias civiles, políticos, jueces…
Aunque no lograrán sus objetivos, provocarán una inmensa irritación con sus coreografías.
Aunque sigue habiendo una pequeña oposición clandestina, nuestro país vive en una autarquía en la que el progreso social, la intelectualidad, la ética, el talento y la belleza nos hacen progresar como nunca antes lo habíamos hecho. España aguanta, acosada por el resto de la humanidad, por esos países en los que los ciudadanos son libres para abrir una cuenta en TikTok.
Mientras tanto, en Alemania, el partido que ostenta el poder, sigue propagando el odio contra los instagramers. Les obligan a llevar brazaletes que los identifiquen e incluso comienzan a hacinarlos en guetos.
A la vuelta del verano, el canciller alemán decide invadir Polonia. En una tapia de una cárcel puede leerse la siguiente inscripción...
En 2024 ha nacido la cookiewall en los periódicos digitales españoles: si no pagas, el periódico instalará cookies de terceros en tu ordenador. Me vuelve un poco loco que esto esté pasando sin que haya habido un poco de polémica.
En principio, las cookies no son algo terrible. Son archivos de texto con pequeños datos que se utilizan para identificar tu ordenador: usuario y contraseña, por poner un ejemplo. Pero las cookies propias evolucionaron a "cookies de terceros", cookies que implantan socios de las webs a las que visitas y que monitorizan el uso que haces de su página.
Las empresas que recogen toda esta información personal (género, edad, sueldo, ubicación geográfica, estado civil, estudios, ingresos, aficiones, intereses...) la cruza con otros miles de usuarios hasta crear grupos demográficos. "Parejas con dinero", "Solteros ambiciosos" son algunos de los grupos demográficos que sacaron en el programa Last Week Tonight. En principio, estos grupos ayudan a las empresas anunciadoras a seleccionar los usuarios a los que quieren mostrar sus anuncios personalizados.
Estas empresas generan paquetes completos con datos de estos grupos, pero también lo hacen con información más sensible, como enfermedades u orientación sexual, y venderlas a cualquiera, igual que la información del anterior tweet. Last Week Tonight sacó un fragmento en el que mostraba cómo se pueden comprar códigos postales y nombres de personas con diabetes, cáncer, hipertensión y depresión.
Enlace al programa en youtube (ENG sin subs en ESP): www.youtube.com/watch?v=wqn3gR1WTcA (también está disponible en la plataforma HBO)
Hay data brokers que han vendido listas de datos con títulos como:
Algo más que explica este programa es que estas empresas dicen que anonimizan los datos que venden, pero en realidad con solo 15 datos personales un hacker es capaz de asociar la información de un código numérico con una persona. Por ejemplo, en EE. UU. un hombre fue capaz de localizar a una ex-compañera pagando 45 $ a un data broker. Después de encontrarla, la mató.
¡De hecho, el propio elDiario.es ya ha explicado lo peligrosas que son las cookies publicitarias para la seguridad nacional!:
Datos sensibles de políticos y militares de la UE acaban en Rusia y China por el rastreo publicitario: www.eldiario.es/tecnologia/datos-sensibles-politicos-militares-ue-acab
También una página asociada a elDiario.es contiene información sobre lo escandalosa que es esta industria: quo.eldiario.es/tecnologia/a43821/data-brokers/
Fue la directora ejecutiva del Foro Mundial de la Privacidad, Pam Dixon, quien aireó el lado más oscuro de los data brokers en el Senado de Estados Unidos a finales de 2013. “La industria de los data brokers, tal y como es hoy día, no tiene limitaciones ni pudor. Venderá cualquier información, de cualquier persona, sin ninguna sensibilidad, a 7,9 centavos por nombre, que es el precio de una lista de víctimas de violación vendida recientemente”, declaró ante la Comisión de Comercio.
Los periódicos digitales españoles han decidido que nuestra información personal tiene un precio. O les pagamos o venderán esa información personal a vete a saber quién. Ni siquiera ellos saben en qué manos puede acabar la información que recopilan de nosotros.
Las preguntas que nos podemos hacer ahora que sabemos que los data brokers son una fuente de financiación a la que no quieren renunciar:
Durante el 15-M el eslogan era:
"No somos mercancía en manos de banqueros".
En 2024 lo tenemos que actualizar:
"No queremos ser mercancía en manos de periódicos digitales".
¿Qué podemos hacer como consumidores de información? Seleccionar mejor los medios de comunicación a los que acudimos.
A día de hoy, estos son algunos diarios que no piden dinero para que puedas rechazar las cookies de terceros:
Muchas veces son más peligrosas las medias verdades que las mentiras y este artículo, de claro tiente xenófobo, de Marcos Ondarra para The Objective es un buen ejemplo. Empecemos por el titular, donde se asegura que la mitad de los asesinatos machistas de este año han sido cometidos por extranjeros, pero esos datos se basan en las estadísticas publicadas por el Ministerio de Igualdad, donde no indican si los agresores son españoles o extranjeros, sino si han nacido o no en España, que no es lo mismo: no todo nacido en España es español; y no todo nacido en el extranjero, es extranjero. Esto tiene su importancia a la hora de comparar cifras porque los extranjero son el 13,5% de la población (no el 12,6% que se dice en el titular), pero lo nacidos en el extranjero (extranjeros y españoles) son bastantes mas, el 18,3%.
Otra manipulación es haber realizado la comparación con tan pocos datos, en concreto con 16 crímenes machistas de este año, lo que puede desvirtuar la comparativa (imaginemos que el primer crimen machista lo comete un extranjero y titulasen que el 100% de los crímenes los cometen extranjeros). Esto se puede ver claramente si comparamos el porcentaje de agresores no nacidos en España de los últimos años, donde podemos ver que las cifras varían bastante.
Pero si queremos hacer una comparación más adecuada, tampoco sería adecuado comparar directamente con el porcentaje de población no nacida en España, sería más adecuado hacerlo con sólo la población masculina y, si tenemos en cuenta que los agresores tienen edades entre 21 y 70 años, con la población masculina nacida en el extranjero en esos rangos de edad, que resulta ser del 22,4%. Es decir, hemos pasado de que un 12,6% de la población comete el 50% de los asesinatos, a un 22,4% (insistiendo que es un comparativa con sólo 16 crímenes machistas). Incluso podríamos precisar mas, ya que casi el 90% de los agresores están entre 31 y 60 años, donde los no nacidos en España suponen el 23,8%
9 de Abril de 1948.
Los grupos terroristas sionistas Irgún y Lehi atacan el pueblo de Deir Yassin, un pueblo palestino cercano a Jerusalén. Mataron a unos 140 de los pobladores de los 600 que tenía, incluyendo a varios a los que capturaron para pasearlos como trofeos por las calles de Jerusalén para, posteriormente, devolverlos al pueblo y fusilarlos. Durante el ataque, entraron casa por casa, matando a todos sus ocupantes, incluidos mujeres y niños. En algunos casos, los padres escondieron a los niños, que fueron encontrados posteriormente por los terroristas sionistas. El resto de la población huyó aterrorizada.
Un dato que llama la atención es que hubo casi el triple de muertos que de heridos, algo no habitual en un enfrentamiento armado, la proporción suele ser la inversa, y que habla de la voluntad sistemática de los terroristas de matar a todos los que pudieran. Dos tercios de las víctimas fueron mujeres, niños y ancianos.
La acción pretendía, según palabras del propio líder del Irgún, Menachem Beguin (posteriormente sería Primer Ministro de Israel, igual que el lider de Lehi, Isaac Shamir) precisamente eso: crear el terror no sólo en ese pueblo concreto, sino infundirlo en los corazones de los palestinos, y que las noticias de las atrocidades cometidas en Deir Yassin los predispusieran a dejar sus casas incluso antes de que los sionistas los echaran, que éstos tuvieran que hacer el mínimo esfuerzo. Por cierto, no sería la última masacre contra población palestina.
Uno de los resultados de la matanza fue que 55 niños y niñas de entre 2 y 12 años quedaron huérfanos de padre y madre. Los terroristas los subieron a un camión y los abandonaron a su suerte en la Puerta de Jaffa de Jerusalén, sin comida, sin sitio al que ir (hay reportes de que algunos de esos niños fueron torturados e incluso abusados sexualmente).
Es ahí donde la matanza se cruza con Hind al-Husseini, una mujer palestina de 31 años, de familia pudiente (tanto su padre como sus hermanos fueron alcaldes de Jerusalén): se encontró a los niños donde los terroristas los habían abandonado, y les dijo que se fueran a sus casas, que era una zona peligrosa. Cuando al poco tiempo volvió a pasar por el sitio: los niños seguían allí. Al preguntar el porqué, uno de los niños le explicó lo que había pasado, lo que habían pasado.
Horrorizada, los llevó a una sociedad femenina de ayuda social que dirigía, Sociedad de Iniciativas de Trabajo Social, en Jerusalén, que alquiló dos habitaciones para albergar a los niños en la propia ciudad, zona de conflicto en los enfrentamientos entre sionistas y palestinos, es decir, un sitio peligroso, a pesar de lo cual los visitaba cada día para acompañarlos y alimentarlos. La monja responsable del convento de Sahyun la convenció para que trasladase a los niños a él: un par de días después del traslado, el edificio en el que estaban las habitaciones fue bombardeado.
Poco después, Hind al-Husseini trasladó a los niños a la casa en la que nació, una mansión construida por su padre, casa que sirvió como orfanato improvisado y que, pocos años después, en 1954, convirtió en un orfanato oficial, Dar al-Tifl al-Arabi, la Casa de los Niños Árabes, que aceptó niños huérfanos supervivientes de diferentes procedencias, incluso judíos.
Al orfanato se fueron añadiendo una guardería, inicialmente, y un colegio de educación primaria. En 1967, antes de la Guerra de los Seis Días, las tasas de los 40 niños de familias pudientes que acudían a él servían para pagar la manutención de 120 huérfanos. Hind al-Husseini crearía también una fundación para poder financiar el orfanato y las clases.
Durante esa guerra, los israelíes bombardearon el orfanato, reconvertido en hospital, destruyéndolo por completo. La Cruz Roja Noruega ayudaría a reconstruirlo. Después de eso, la institución se convirtió en una escuela sólo para niñas (además de orfanato).
La institución que creó todavía permanece hoy en día, es muy considerada por ofrecer formación de calidad, por luchar contra el analfabetismo y por favorecer e impulsar la educación en niñas y mujeres.
Hind al-Husseini fallecería en 1994.
Existe una película biográfica que narra estos hechos, llamada "Miral", de 2010.
Fuentes:
Si en fin de un gráfico es facilitar la lectura e interpretación de los datos, este que publica El Mundo sobre el déficit de España sólo puede calificarse como desastre. El que no supiera como está el tema del déficit en España podría pensar que se va pasar de datos positivos en azul (superávit) a datos negativos en rojo (déficit), cuando en realidad todos son datos negativos y la evolución no es a peor, es a mejor porque se reducen. Y no es ese el único error, porque las barras tampoco son proporcionales a los valores y eso se puede comprobar claramente en que la de 3 y 6,7 superan juntas a la de 10,1, cuando deberían quedar por debajo.
El gráfico correcto debería haber sido así:
Salía hace un rato en portada un artículo de Europa Press en el que Zelensky hablaba de la gravedad de la situación en el Donbás y me parece interesante comentar lo sucedido en los últimos cuatro días en la ciudad de Novogrodivka. Se trata de una ciudad que tenía 14000 habitantes antes de la guerra, bastante densa y con gran cantidad de edificio altos.
En otro tiempo, eso hubiese costado semanas de ataques, pero la ciudad, prácticamente intacta, ha caìdo en cuatro días justos, con muy pocas bajas en ambos bandos. Esto es un claro indicativo de que loa ucranioanos se limitan ahora a ralentizar el avance d elso rusos, pero no plantean una defensa seria, y se retiran en cuanto empìezan los bombardeos y los primeros asaltos.
El caso de Novogrodivka no es único. En la última semana ha caído también Konstantinivka (la del sur, no la grande), y Hrodivka está en un 70% en manos de los rusos.
Por una parte, no se ha preparado la defensa del sector ni se ha fortificado de manera eficiente, por otra faltan medios, y por otra, la ofensiva de Kursk, que sigue obteniendo pequeñas victorias (hoy los ucranianos han tomado tres pequeñas localidades más) ha supuesto un duro golpe moral para los defensores ucranianos del Donbás, que se preguntan por qué los han dejado allí tirados, enviando los posibles y tan necesarios refuerzos a conquistar Rusia.
Es de suponer que el mando ucraniano priorizará la defensa de Pokrovsk y Myrnohrad, cuyos alrededores sí están fortificados, y que sumaban unos cien mil habitantes en el año 2022. La caída de estas ciudades, o de Konstantinivka (la grande, al noreste) dejaría en una situación muy peligrosa a todo el frente, proque a día de hoy no hay ya defensas más allá, aunque es de esperar que se construyan.
En todo caso, Zelensky tiene razón: la situación es ahora realmente grave, y los avances rusos no son ya de unos cientos de metros a la semana, sino de un kilómetro al día en algunas zonas.
Y el caso es que estamos en Agosto y poco se ha oído hablar, de momento, de los F16. Pero esa ya es otra historia.
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El mapa es de @Suriyak.
Escuchas lo que dice la megafonía del vídeo y la verdad es que recuerda a la novela de Orwell, un tipo que fue chivato de los servicios secretos británicos.
youtube.com/shorts/9BARaeH3x4k?si=ij kHp9yhLq0jJS0f
old.meneame.net/story/video-disparan-asesinan-mujer-mano-nino-porta-ba
old.meneame.net/story/policia-ee-uu-mata-hombre-autista-estaba-bromean
www.meneame.net/m/actualidad/policia-california-mata-hombre-negro-sill
old.meneame.net/story/policia-mata-tiros-joven-19-anos-habia-robado-co
old.meneame.net/story/policia-estadounidense-dispara-mata-joven-afroam
old.meneame.net/story/policia-mata-disparo-cabeza-joven-negro-michigan
old.meneame.net/story/otro-policia-mata-joven-negro-eeuu
old.meneame.net/story/fuertes-imagenes-nuevo-video-asesinato-tiros-pol
old.meneame.net/story/videos-demuestran-rusia-miente-sobre-matanza-buc
old.meneame.net/story/momento-mezquita-chiita-bagdad-repleta-ninos-ata
www.meneame.net/m/NSFW/video-soldado-jordano-quemado-vivo-porel-isis-n
old.meneame.net/story/atentado-daesh-campo-futbol-ninos-bagdad-provoca
old.meneame.net/story/outland-video-oscuro-espeluznante-terrorifico
www.meneame.net/m/Boludeces/rapero-kasper-knight-disparo-mejilla-nuevo
old.meneame.net/story/asesinato-indigente-usa-manos-policia-nsfw
old.meneame.net/story/videos-torturas-matanzas-siria
old.meneame.net/story/mas-90-estudiantes-iraquies-apedreados-hasta-mue
old.meneame.net/story/jornada-violencia-sinaloa-deja-13-muertos-difere
old.meneame.net/story/fuerza-destructiva-ar-15-mirada-inedita-impacto-
old.meneame.net/story/imagenes-satelite-muestran-fosa-comun-bucha
A raíz de un estudio de la Fundación BBVA sobre pérdida de capital humano en España, El Mundo publica hoy un reportaje donde asegura que en 2022 hubo 531.889 españoles que se fueron de España. Pues bien, ese dato es falso, como puede comprobarse en el INE, ya que la cifra de 531.889 corresponde al total de residentes que se fueron en 2022, pero, de ellos, 390.765 eran extranjeros y 141.124 españoles. Es mas, las salidas se fueron ampliamente compensadas con las llegadas con un total de 1.258.894: 1.120.474 extranjeros y 138.420 españoles.
En el sumario de portada ya no indican españoles y son "personas formadas en España", aunque eso es mucho aventurar, sobre todo en lo referentes a las salidas de extranjeros.
Si nos vamos al desglose de las salidas por grupos de edad que publica el INE, no creo que sea muy riguroso afirmar que todos ellos se han formado en España, incluso de los que los españoles que han salido.
Decía Rommel que la guerra en el desierto tenía que ser dirigida por un almirante en vez de por un general, y que a él, que le había tocado ese papel, le quedaba muy claro que conquistar kilómetros cuadrados de desierto era tan soberanamente estúpido como conquistar millas cuadradas de mar.
En el desierto, como en el mar, lo importante es localizar y atacar las unidades del enemigo, destruir sus fuertes, sus puntos de aprovisionamiento, y reducir la movilidad de sus unidades. Lo demás, lo que se avanza o lo que se retrocede, es completamente irrelevante.
En estos momentos, podemos ver de nuevo este fenómeno en la guerra entre Ucrania y Rusia. A Rusia le sobre territorio al que retroceder mientras los ucranianos avanzan en Kursk, De hecho, aunque en algunos puntos parece que los rusos se han limitado a evacuar a los civiles, sin enviar fuerzas defensivas apreciables, los ucranianos han dejado de avanzar, porque le faltan fuerzas para cubrir los flancos del territorio ocupado.
Si convertimos la zona de ataque en un cuadrado imaginario, tenemos que un frente de 50 kilómetros de ancho y 20 de profundidad, es un frente de 90 kilómetros de contacto con el enemigo y 1200 kilómetros cuadrados de éxito. Y para eso, se necesitan unos 20.000 hombres. Si los ucraianos pretendiesen avanzar el doble, o pongamos el triple, tendríamos un frente de 50 kilómetros de ancho y 60 de profundidad, lo que dejaría 3000 kilómetros cuadrados conquistados, pero 170 kilómetros de zona de contacto. Para esto ya necesitas 40.000 hombres como poco, y ojo, porque acabas de alejarte de tus puntos de apoyo y suministro, por lo que necesitarás más camiones que recorran distancias más largas, y a descubierto, que es la situación más peligrosa actualmente, por la presencia de los drones. Y entonces, ¿qué? ¿Seguimos avanzado? Cuanto más te alejas, mayor riesgo corres, sobre todo si no ensanchas el punto de partida. Pues venga: ampliamos la base a 1200 kilómetros, y avanzamos 100 kilómetros. son 10.000 Kilómetros cuadrados de terreno conquistado, y tenemos una zona de contacto de 300 Km, para lo que necesitaríamos cerca de 80.000 hombres.
Pues ahora es el momento de ir a un mapa, y en la región de Kursk trazar ese cuadrado de 100 por 100 Kilómetros y darse cuenta de que equivale a una especie de lunar en el mapa de Rusia. Algo así como si un almirante español dijera que va a conquistar Canadá y ha conseguido llegar con sus barcos a Madeira.
Avanzar, cuando no sabes a dónde vas, se llamó desde siempre perderse. Y esa palabra no ha cambiado.
Este fin de semana he hablado con algunas personas que entienden más que yo de temas militares y me parece interesante compartir un par de apreciaciones. La primera es teórica. Las siguientes serán prácticas.
Si algo tenemos claro, creo que todos, es que no se puede creer una palabra de lo que dice públicamente el gobierno ruso. No se puede creer nada de lo que dice nadie, pero en el caso de los rusos, la desconfianza debe ser extrema, porque seguían diciendo que no iban a atacar Ucrania cuando sus tropas ya llevaban dos horas invadiendo el país. Seguramente a alguien se le fue la pinza con alguno de los muchos husos horarios del país, o simplemente se estaban riendo de la peña, pero los hechos con los hechos.
De lo que sí te puedes fiar es de lo que ves en los mapas. De lo que la gente hace, a pesar de las declaraciones, las promesas y demás parafernalia verbal. Y los mapas, hoy en día, están disponibles para cualquiera que quiera echar un ojo y hacer unas cuantas mediciones.
En primer lugar, todo, absolutamente todo el material, provisiones y tropas que participan en la guerra tienen que cruzar el río Dniéper, porque todas las operaciones ese desarrollan en la orilla oriental del río y porque el aprovisionamiento, que procede de Occidente, llega por el otro lado. Esto es un hecho. Otro hecho es que el Dniéper es un río verdaderamente enorme, que todo ese material, hombres y aprovisionamietntos hay que cruzarlos por puentes, así que hay que mirar dónde están esos puentes. Y luego tenemos las distancias.
Por ejemplo, desde Cherkassy hasta el frente de Avdivka, hay 600 kilómetros, más o menos lo mismo que hasta Sloviansk, Kramatorsk y Liman. Meterle 600 Km a todo lo que envías al otro lado ya es una barbaridad, pero es que si miramos el mapa, el siguiente puente después de Cherkassy está en Kremenchuk, 130 kilómetros más abajo. Sí, hay 130 Km de río sin un solo puente. En Kremenchuk hay dos pasos, y el siguiente está en Kamianske, 120 Km más allá. Y desde Kamianske al final del río hay solamente nueve puentes más, muy concentrados en un par de ciudades. Los puede contar cualquiera que tenga ganas y cinco minutos para hacerlo.
Desde que comenzó la guerra me vengo preguntando por qué puñetas los rusos no atacan nunca esos puentes, que son verdaderos cuellos de botella por los que hay que pasar armas, municiones y aprovisionamiento diario para aproximadamente trescientos mil combatientes. Porque no es que lo intenten y no lo consigan. Es que no lo intentan y eso no me cabe en la cabeza. Si cortas esos puentes dejas a todo el frente ucraniano en pelota picada, lo obligas a dar unos rodeos inmensos en sus líneas de suministro y el colapso es inevitable. Pero no lo hacen. No lo intentan. Nada.
Y ahí es donde entran en juego las intenciones de Putin, las que vemos, y no las que declara. Si quisiera conquistar toda la franja de Ucrania al este del río Dniéper, que es una franja enorme, atacaría esos puentes, impediría la llegada de suministros y sería trabajo hecho: nueva línea del frente en el río, cada uno a un lado, y cien años de frontera, porque defender la orilla oriental del Dniéper, sin esos puentes, es misión imposible.
Si no los ataca, es muy probable que su intención sea, con el tiempo, atraer a todo el ejército ucraniano hacia el lado oriental del río para, desde el Norte, desde Bielorrusia, conquistar TODO el país cuando esté indefenso. Eso es lo que estamos viendo, y nadie sabe cómo le saldrá el plan, pero si quisiera conquistar un trozo de Ucrania atacaría los puentes. Como no lo hace, es que su intención es quedarse con todo.
Así las cosas, parece probable que la paz no llegue cuando los rusos ocupen el Donbás, ni siquiera cuando logren una buena tajada de otras regiones como la de Jarkov. El tema de los puentes indica que su intención es ir a por el país entero.
No parece muy tranquilizador.
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Como casi siempre, utilizo el mapa de guerra de @Suriyak
Introducción
Roma siempre fue un pueblo terrestre, pese a ello, necesitó desarrollar una gran flota. Ya en la Primera Guerra Púnica, se vio obligada al desarrollo de una armada para poder combatir a Cartago. Con todo, no será hasta los tiempos de Augusto que esa flota tendrá una importancia real en los asuntos del Estado Romano. Sin su flota, Roma no podrá proteger las rutas comerciales que proporcionaban grano a la ciudad. Durante el bajo imperio, cuando poco a poco la flota fue desapareciendo, el hambre, la incertidumbre y la inseguridad regresarán desembocando en los saqueos de la ciudad y contribuyendo a la caída del Imperio Romano de Occidente.
Los Antecedentes Navales de Roma
Pese a que hemos señalado que Roma fue un pueblo terrestre, en su necesidad de construir una flota, lograron hacer grandes aportaciones en la construcción de naves de guerra. Y sí, específicamente en las naves de guerra porque el Estado Romano jamás tuvo en su haber una flota mercante. Esa tarea la dejó en manos de extranjeros (pueblos dominados por Roma, eso sí). Incluso, su armada no estaba tripulada por ciudadanos romanos. Eso sí, al frente de la misma siempre estuvo el Estado Romano: era dinero romano el que pagaba, y funcionarios romanos los que administraban y comandaban.
Para entender mejor la Armada Romana, lo mejor es echar un vistazo a sus antecedentes, comenzando por los fenicios. Los fenicios habitaban las cositas de la actual Siria. Era un territorio pequeño y rodeado de grandes montañas. Llegaron a cultivar todo el espacio disponible, y pese a ello, se vieron invitados a hacerse a la mar. Primero, como pescadores, más tarde como mercaderes y piratas. Llegaron a ser considerados los mejores marineros. Salieron del Mediterráneo en innumerables ocasiones: fueron una gran potencia marítima. Sus tripulaciones eran tan prestigiosas que constantemente eran contratados como exploradores. Proporcionaron informaciones no siempre creídas por sus coetáneos, y, en ocasiones, escondían los descubrimientos de forma que, con su destrucción como pueblo, se perdieron para siempre.
Los fenicios utilizaron dos modelos de barco diferentes. Uno era alargado, y solía utilizarse con fines bélicos, aunque a veces se le daba uso comercial a larga distancia o era utilizado en viajes exploratorios. El otro modelo era utilizado para el comercio en general, era una nave más pequeña y redonda. Los barcos de proa alargada podrían derivar en penteconteras de cincuenta remeros que aparecen por primera vez en las pinturas de las cerámicas griegas geométricas.
En una terracota de la Edad de Bronce (1580-1200 a.C, en el Imperio Nuevo), descubierta en Biblers, se encuentra una de las representaciones más antiguas de una nave Fenicia: es perfectamente simétrica, redonda y con una plataforma con una empavesada al rededor (básicamente es una defensa que se hace con paveses, es decir, escudos grandes). Son similares a las naves de los famosos Pueblos del Mar. Posiblemente, este modelo era el más común del segundo milenio, después sería la nave característica de los fenicios, llamada gaulós por los griegos. Las naves llevaban curiosos mascarones y efigies de Dioses enanos en la proa por tal de protegerla. La capacidad de almacenaje de estos barcos era de unas 500 toneladas, que no varían del segundo al primer milenio. No obstante, el número de remeros, velas y otras características de la nave sí que se modificarán. Debido al carácter mercante, los fenicios irán evolucionando hacia un tipo de nave mixta que les permita comerciar y combatir. Como se pueden ver en los relieves de Senaquerib, en Nínive (705-681 a.N.E.), los fenicios ya introducen un nuevo órden de remeros, es decir, construyen birremes. Navegaban principalmente a vela, pero el uso de remeros compensaba la falta de hidrodinámica de las naves. Las naves redondas de transporte utilizaban la propulsión a vela, la dirección iba a cargo de un remo fijado en un lado de la popa que hacía la función de timón.
A pesar de desarrollar este modelo mixto, construyeron unas naves militares similares a las griegas. Existían ciertas diferencias, entre ellas, la falta de ceñidores de madera que absorbieran la fuerza del impacto. Esto les obligó a utilizar un espolón mayor que sí fuera capaz de asumir el golpe, pero, a su misma vez, les hacía innecesario un segundo espolón pequeño que incrementase los daños. Otra de sus características era una cubierta superior delimitada por puntales en los que se colgaban escudos protegiéndola, y un casco más amplio con forma cubra en los dos lados. La forma especial de las proas se debía al hecho de tener que ajustar un espolón a una superficie curva.
Los barcos de guerra utilizaban tanto la vela como los remos para la propulsión, y eran más alargados que el resto de las naves. La proa acababa en una representación de un rostro, un elemento que caracteriza también a los barcos romanos. De la proa salía el espolón que era de madera cubierto de bronce. Estas naves eran un diseño propio del pueblo fenicio. Lo más común fue la pentecontera con 24 remeros por banda, dos timoneles y el comandante en la popa y un subalterno en la proa, comunicados por un pasillo dónde colgaban los escudos. Tanto los birremes como los trirremes fenicios fueron siempre más redondeados que los griegos.
En el siglo VII a.N.E., se introduce por primera vez el uso del trirreme. En el siglo IV a.N.E., cuando Alejandro puso Tiro bajo asedio, en la defensa de esta se utilizaron trirremes, tretrarremes y quinquerremes. Los soldados luchaban desde los puentes. En los siglos V y IV a.N.E., las galeras fenicias son las descendientes de las que ya aparecen en Senaquerib. Adaptaron de las griegas el refugio de proa. En aquella época, sus galeras ya eran trirremes y no birremes. Cuando perdieron su hegemonía marítima, mantuvieron su oficio y siguieron construyendo naves, aunque fueran para otros.
La armada romana recibe una influencia fundamental de las naves griegas. Los griegos eran otro pueblo comerciante y marinero. Pero también eran reconocidos piratas (1). Era un pueblo unido culturalmente pero separado políticamente, a excepción de los tiempos de Filipo II y Alejandro el Grande, quienes sí lograron unificar Grecia bajo su reinado. Los griegos surgieron fruto de la mezcla de culturas y dieron tanta importancia a las naves de guerra como a las naves mercantes. La competencia existente entre las propias polis y entre estas y otros pueblos del Mediterráneo, como los fenicios, los obligó a llevar a cabo un importante desarrollo naval.
En la antigua Micenas, las naves eran ligeras para hacer la función de naves mercantes y piratas a la vez. Las naves mercantes griegas se caracterizaban por llegar a una velocidad aproximada de unos siete nudos, y tenían una capacidad de almacenaje de unas 250 toneladas de mercancía. Con tal capacidad de transporte, queda claro que podían hacer viajes largos sin necesidad de hacer escala para aprovisionarse. Su navegación era fundamentalmente a vela (técnica ya conocida en el 3.500 a.N.E.). Una navegación a base exclusivamente de remeros era poco rentable, y por tanto, el uso de estas se veía limitado a ciertas actuaciones, como la entrada y salida de los puertos o las distancias cortas. La combinación de ambos sistemas de impulso (vela y remos), tenía la gran ventaja de poder hacer servir, según las circunstancias, solo la vela, combinarla con un reducido número de remeros o tirar solo de estos. Aunque no tenemos claro cómo era la forma de estas naves, L. Casson destaca que en los vasos griegos podemos observar que postería una figura grácil, con líneas soberbias agregando un arco en la popa. Es similar a la curva cóncava que distinguía a los dippers americanos del siglo XIX (2).
La nave griega, por definición, era también la pentecontera. Tenía 50 remeros y era alargada. No obstante, si nos remetemos a Heródoto cuando habla de las penteconteras foceas:
Heródoto, Hist. I, 163-164: “Los foceos soltaron las amarras de sus naves largas, embarcaron las mujeres y los hijos, cargaronbienes, además las imágenes de los templos y los exvotos, excepto los que eran de bronce, los de piedra y las pinturas. Suben a bordo, entonces, el resto de sus propiedades, y suben ellos mismos y zarpan hacia Quios.”
Estas naves eran capaces de transportar gran capacidad de mercancías y personas mediante remeros, por lo que seguramente el número de estos era superior, en algunos casos, a 50, de forma que el nombre de pentecontera seguramente definía un modelo de nave concreto con indiferencia del número de remeros.
Durante el siglo VIII a.N.E. se alterna con el nuevo modelo de nave, la birreme (doble línea de remeros). El año 800 a.N.E. fue cuando apareció por primera vez el espolón, el arma ofensiva situada en la proa de la nave, el objetivo de la cual era dividir en dos las otras naves mediante una embestida. Esto dará mucha más importancia a la velocidad y resistencia de las naves, apareciendo el concepto de armada de guerra. Antes de la creación del espolón, las batallas se decidían solo por abordajes. Esta necesidad de velocidad, tanto para embestir como para huir, implicaba la necesidad de más remeros. El papel de estos en la embestida es fundamental, ya que el viento no era capaz de proporcionar la fuerza necesaria a la nave para partir el casco de otro barco.
Añadir más remeros suponía alargar la nave y esto implicaba convertirla en algo más vulnerable a los ataques enemigos: cuanta mayor es la longitud, más débil es su centro y menor su capacidad de maniobra. Es en ese momento en el que se empieza a difundir el uso de birremes que añadían un nuevo orden de remos por encima. Mediante dos líneas de remeros doblaban la fuerza de empuje sin apenas alargar la nave: prácticamente no sufría modificaciones. El primer orden de remeros se encontraba a la altura de la regala, y el segundo remaba a través de unas puertas abiertas por encima de la línea de flotación. El número de remeros podía variar, por ejemplo, si eran 50 se trataría de una birreme pentecontera. Los relieves de Senaquerib (705-681 a.N.E.) son la representación más antigua que tenemos de birremes. En el siglo VII y VI a.N.E. las birremes ya eran las reinas del mar.
La vía abierta por la birreme dio pie, sin duda, al nacimiento a finales del VII a.N.E. de la obra maestra del arte naval griego: la trirreme. Ignoramos el nombre del inventor, y es probable que fueran los fenicios, aunque Tucídides (I, 13-14) nos confirma que los Corintios fueron los primeros griegos en construirlas. Su aparición en las flotas fue progresiva, y no será hasta finales de la segunda mitad del VI a.N.E., que podemos ver el desarrollo de flotas importantes de trirremes, como la de Siracusa. La trirreme tenía una eslora de 5,5 metros. Tenía más de 2,5 metros de borda libre, y 90 centímetros de calado. Era suficientemente pequeña para mantener la poca resistencia al viento que caracterizaba a las naves griegas. Mediante la instalación de una postiza a la altura de la regala por la parte exterior, se logró añadir un nuevo orden de remos sin modificar demasiado las formas y medidas de la nave. Solo aumentó 50 centímetros.
En lo que se refiere a la tripulación, los remeros inferiores eran conocidos como talamitas. Remaban a 50 centímetros de la línea de flotación. Los del segundo orden eran los zugyuites, situados a la altura de la regala. En ambos casos, el número de remeros era, por lo general, de 27 por banda, haciendo un total de 108. A estos hay que sumar el tercer orden, el de los tramitas, situados en la postiza: unos 31 por banda, sumando 62, haciendo un total de 170 remeros. Adicionalmente, un trirreme solía llevar 25 suboficiales, 5 oficiales y 2 timoneles: unas doscientas personas en total.
Las naves griegas se construían con una madera muy fina. La tripulación solía representar una tercera parte del peso (unas 40 toneladas métricas). La proa tenía forma de bulbo, que se proyectaba hacia adelante bajo el agua (al revés de lo que estamos acostumbrados a ver hoy día=, y la popa se elevaba gradualmente formando una especie de cresta/abanico que la protegía de los golpes del mar. La velocidad máxima era de unos 11,5 nudos (21,3 km/h). La trirreme duró toda la antigüedad. Después de la batalla de Salamina (450 a.N.E.) la trirreme recibió una súper estructura que servía de puente de combate. Era un instrumento rápido y maniobrable que constituyó, a manos de marineros expertos, una temible herramienta de combate. Hacia el año 400 a.N.E., se experimentó con la cuatrirreme, y por iniciativa de Dionisio de Siracusa, apareció la quinquerreme. Se aumentaron el número de remeros, pero no de remos. No había nuevas filas, sino más hombres en cada fila. Por ejemplo, una birreme con dos remeros por bancos se convertía en una cuatrirreme, sin sufrir cambio alguno. Estas naves no aportan demasiadas ventajas con respecto a la trirreme, razón por la cual tardaron en generalizarse.
Por lo general, la imagen más extendida que tenemos de los marineros antiguos es la de unos hombres embarcados en una galera siguiendo la línea de la costa. El sistema de navegación por cabotaje está documentado en el MEditerráneo, en el Índico y en el Atlántico. Pero esta teoría que está tan difundida y aceptada es un prejuicio de las capacidades de los marineros antiguos y parte de una idea preconcebida. Los diferentes estudios han concluído que eran buenos marineros: sus naves eran de calidad y tenían buena orientación. El hecho de que navegaron por el Mediterráneo, que es un mar cerrado estrecho y alargado, no debe hacernos olvidar de que no se pueden ver las costas desde todos los puntos del Mediterráneo. De hecho, los arqueólogos José María Luzón Nogués y Luís Miguel Coín Cuenca, demostraron esto con una prueba real: reconstruyeron una nave de la época y realizaron un recorrido desde Cádiz hasta Ibiza, La conclusión fue que el puntal de los barcos era demasiado bajo lo que provocaba que, incluso desde el punto más alto, el mástil, no siempre era posible detectar la costa.
En lo que se refiere al cabotaje, es obvio que es el primer sistema, y se seguirá manteniendo como la forma menos arriesgada de navegar.- Pero pese a ello, no estaba exento de peligros: los escollos y los bancos de tierra cerca de la costa suponían un riesgo para la navegación. Era el sistema ideal para trayectos cortos o de exploración. Este sistema anula totalmente la existencia de la navegación nocturna ya que durante la noche la costa no es localizable, por tanto, se hacían trayectos cortos buscando dónde dormir. Un ejemplo de esto lo encontramos en la Ilíada de Homero. Según el historiador Lionel Casson, los antiguos ya conocían las estrellas para guiarse, no obstante, solo las utilizaban en casos concretos. El sistema utilizado normalmente en caso de pérdida era dejar ir aves (palomas, cuervos u otros), si regresaban a la nave quería decir que no había tierra cerca.
A comienzos del primer milenio se introducirá el uso de la astronomía. En Mesopotamia se habían estado acumulando conocimientos de esta ciencia durante siglos, a pesar de que los griegos lo atribuyeron a los fenicios. Estrabón (Geografía I) dice que se orientan por la osa menor. Algunos estudiosos discrepan y dicen que debía de ser la osa mayor. Tanto griegos como fenicios estaban sobradamente preparados para la navegación de altura y los trayectos largos sin escalas, a pesar de no poseer ningún tipo de carta de navegación ni instrumento específico para guiarse. Sin estas herramientas, fundamentales hoy día para la navegación, el buen piloto era aquél que conocía la descripción de las costas, el movimiento de los astros y la ciencia de los vientos, según explican los textos antiguos. Estos conocimientos de importancia relevante, reposaban sobre la acumulación de experiencias transmitidas oralmente, o se ponían por escritos en las recopilaciones llamadas periplos, similares a unas instrucciones náuticas actuales. Los periplos más antiguos se remontan al siglo IV a,C,m pero esto supone la existencia de algún documento similar en una época inmediatamente anterior.
La navegación nocturna, que evita paradas para dormir, queda atestiguada en la obra de Homero, la Odisea, dónde tenemos referencias a los viajes de hecho, al uso de la astronomía como guía, a los viajes sin referencias terrestres, al almacenaje de alimentos y al descanso nocturno dentro de la propia nave. Si existía la navegación nocturna, debía de existir también un método de iluminación de las naves. En este caso, tenemos constancia de un sistema utilizado por las naves egipcias, equipadas con unas ánforas con un agujero circular y otros triangulares más pequeños. Los pequeños servían para indicar la posición de la nave, y el grande proyectaba un rayo de luz que iluminaba la cubierta. En el interior de la ánfora, una esponja mojada con aceite o una mecha flotante mantenían la luz. Griegos, fenicios, cartagineses y, más tarde, romanos, hacían servir este u otro mecanismo similar para iluminar sus naves durante la noche.
La mayor parte de los trayectos eran realizados a vela. Originariamente se utilizaba una vela cuadrada, pero en la época romana se introdujo el uso de dos velas más. Por esta razón, el conocimiento de los vientos era de gran importancia para la navegación. En el mundo grecorromano los vientos estaban asociados a los puntos cardinales. En época de Homero se reconocen cuatro vientos, después pasará a ocho, luego doce y, finalmente, en época de Augusto, se alcanzará la cifra de 24. A pesar de las citadas capacidades marineras de los antigüos, los días de navegación eran limitados. Hesíodo en Los trabajos y los días, recomendaba navegar solo los cincuenta días posteriores al solsticio de verano, es decir, julio y agosto. La mayoría, sin embargo, recomendaban de abril a octubre, meses durante los cuales el Mar Mediterráneo se encuentra en sus mejores condiciones. En cuanto a la velocidad a la que eran capaces de viajar, la más admitida es la que Heródoto nos proporciona (Historia, IV, 85-75): una jornada diurna, de 17 horas, en línea recta y vientos favorables puede significar 700 estadios (1 estadio son unos 176 metros, por lo que hablamos de 123,2 km).
La Armada Romana
La Primera Guerra Púnica supuso, por primera vez en la historia de Roma, una guerra dónde el enfrentamiento más importante se llevó a cabo en el mar. Roma, una nación terrestre con costumbres de interior, no había salido aún de la península Itálica, y aún menos, a mar abierto. Durante la guerra, las flotas jugarán un papel vital.
Después de la solicitud de ayuda a Roma por parte de los mamertinos (4) de Mesana (Mesina) para hacer frente a los cartagineses, Roma se lanzó de lleno a la Primera Guerra Púnica sin disponer de ninguna flota propia, por lo que el Senado Romano se vio obligado a solicitar la colaboración de sus aliados marítimos. Las villas griegas del sur de Italia aportaron sus penteconteras y sus trirremes, con las que Roma pudo atravesar el estrecho de Mesana y llegar a tierras sicilianas.
Hasta la llegada de este conflicto, ROma había confiado la defensa de sus costas a una estrategia puramente terrestre. Sus intervenciones navales se habían limitado a actos como la movilización de una escuadra de diez naves en la guerra contra Tarento, el año 282 a.N.E. La mayoría de las necesidades navales de Roma las cubrían otras ciudades amigas. Roma llegó a crear dos cargos de almirante en el 311 a.N.E. para dirigir las flotas aliadas.
La Primera Guerra Púnica se alargó desde la intervención romana en Sicilia el año 264 a.N.E., hasta el 241 a.N.E. Para los coetáneos fue un conflicto interminable. El hecho más relevante del período, y la razón por la cual este conflicto es importante al analizar la Armada Romana, es el incremento, o más bien creación, del poder naval romano. En el 264 a.N.E. Roma recorrió a naves tarentinas, locrias y napolitanas para llegar a Sicilia. Sin embargo, el cónsul Octacilio impulsó a los romanos a lanzarse al mar apenas tres años más tarde, en el 261 a.N.E. (Polibio, 1, 20-21). Su esfuerzo naval, superior en conjunto al de los cartagineses, fue extraordinario.
La construcción de la armada fue promovida por el cónsul Cneo Cornelio Escipión Asina (260 a.N.E.), es el tío de los famosos hermanos Escipión de la Segunda Guerra Púnica, por si alguien se lo pregunta. Durante los siguientes cinco años, las operaciones navales sustituyeron en importancia a las terrestres. Como resultado de esta política y de este esfuerzo, encontramos algunos éxitos frente a la flota cartaginesa que, por otro lado, era muy superior a la romana. Es el caso de la batalla de Myles, por ejemplo, hacia el 260 a.N.E aproximadamente, en la que Roma logró presentar una flota de 100 quinquerremes y 20 trirremes. Polibio nos narra una historia célebre que puede contener una cierta realidad. Según él, los romanos ignoraban cómo se construían los quinquerremes y se vieron obligados a copiar una galera cartaginesa de cinco órdenes que encontraron encallada en sus costas. Entrenaron a sus remeros en tierra. No obstante, la flota romana no era ninguna maravilla, y por ello, el cónsul Caius Dulius (260 a.N.E.), introdujo el corvus (5), que es lo que les permitió obtener la victoria.
El corvus consiste en una pasarela móvil situada en la proa de la nave. Esta pasarela va dotada de un peso de plomo delante. Cuando se despliega la pasarela (es decir, cuando la hacen bajar), con el peso y la fuerza de la caída el peso agujerea la cubierta de la nave enemiga, fijando así el puente e impidiendo a la nave desengancharse durante el abordaje. Quedaban las dos naves unidas y la batalla naval pasaba a ser un cuerpo a cuerpo dónde, ahora sí, Roma tenía ventaja. Myles fue la primera batalla dónde los romanos lograron una victoria naval frente a los cartagineses, y según Polibio, la primera vez que utilizaron el corvus.
Después de la derrota romana en la batalla de Deprano, en el 249 a.N.E., Roma perdió su flota y no retomó el esfuerzo naval hasta el 243 a.N.E., no obstante, en el 241 a.N.E., el cónsul Caius Lutatius Catulus, obtuvo una victoria naval frente a la flota cartaginesa en las islas Egadas, al oeste de Sicilia. La nueva flota, que fue construida después del tiempo de parálisis en la producción naval, se pagó con capital privado y estaba compuesta de unos 200 barcos. La batalla tuvo por objetivo interceptar una flota de Cartago que llevaba refuerzos para liberar Lilibeo del asedio al que estaba sometida. Con esta victoria, los refuerzos no llegaron y Cartago solicitó la paz.
El tratado de paz que firmó cartago implicó, por un lado, evacuar Sicilia y prohibir a los cartagineses hacer la guerra a Hierón de Siracusa ni a ningún otro aliado de Roma, además de pagar 2.200 talentos en veinte años y devolver los prisioneros sin derecho a rescate. Por otro lado, suponía la pérdida de la supremacía naval cartaginesa, y, por primera vez, la actuación de flotas navales romanas. No obstante, para hablar de una auténtica supremacía romana deberemos esperar a los tiempos de Pompeyo y Augusto.
La actuación de Pompeyo contra los piratas de Cilicia no fue la primera acción romana contra la piratería, pero sí la más emblemática. Roma ya se había visto obligada a combatir en otras ocasiones en el mar Adri´çatico, por ejemplo, contra los piratas Ilirios, dirigidos por la reina Teuta, justo mientras duraban las rivalidades entre Roma y Cartago. No obstante, Roma no se plantea la piratería como un problema real a combatir hasta bien entrado el siglo I a.N.E, cuando los piratas de Cilicia empezaron a poner en jaque la estabilidad del estado.
Cilicia era el nombre de una región que se encuentra en la costa meridional del Asia Menor (sureste de Anatolia). Se trata de un territorio litoral y montañoso, cuya costa está constituida por sucesivos precipicios. Los piratas de esta región establecieron su cuartel general en la ciudadela de Coracesium (actual Alanya, Turquía). A comienzos del siglo I a.N.E, Rodas había sido obligada a deshacerse de su flota, los Seléucidas la habían perdido contra Roma y esta última había renunciado a la suya (sí, renunciado). Por tanto, los piratas de Cilicia controlaban el mar a su antojo. Cerca de los años 70 a.N.E. su actividad alcanzó un crescendo insostenible.
En el año 68 a.N.E, la piratería era ya un problema vital para Roma, y amenazaba su propia existencia. Dos pretores, Sextilius y Belinus, con sus doce lictores (una especie de escoltas públicos), fueron secuestrados en territorio italiano. Corrió la misma suerte un grupo de jóvenes nobles,entre los que se encontraba Antonia, la hija de Marco Antonio Crético (padre de Marco Antonio el Triunviro), almirante nombrado en aquél momento para combatir a los piratas. También atacaron una flota romana en Ostia y saquearon Caieta. Además, habían provocado la interrupción del comercio marítimo, de forma que el suministro de trigo quedaba interrumpido y el hambre amenazaba a Roma.
En el año 67 a.N.E., el tribuno Gabini propuso que uno de los cónsules fuera investido por tres años con autoridad absoluta de gobierno sobre el mar y la costa, hasta 400 estadios en el interior (75km de litoral). Además, quería revestir al titular de una autoridad sin precedentes, ya que la ley permitiría al cónsul potestad absoluta para escoger 15 lugartenientes a sus órdenes inmediatas y libertad para tomar todo el dinero del tesoro del estado necesario, formar una flota de doscientas naves y reclutar soldados, remeros y marineros. No propuso a nadie en concreto, pero estaba claro que sería Pompeyo quien disfrutaría de esta máxima autoridad, era el candidato ideal. Los patricios se opusieron, pero César y los plebeyos le dieron apoyo aumentando el número de naves a 500, y el de soldados a 120 mil infantes y cinco mil jinetes. No obstante, Apiano solos no la cifra de 270 naves. Seguramente 500 era el número máximo que podía movilizar Pompeyo, pero sólo puso un servicio una parte. Es posible que Pompeyo formará su flota como había hecho siempre Roma: reclamando a sus aliados: Rodas, Marsella u otros. Sin embargo, el historiador Lucio Anneo Floro nos dice que Pompeyo disponía de naves de sobras, propias y rodillas. De esta forma da a entender que habían hecho un mix.
La clave de la victoria de Pompeyo fue la perfecta estrategia que desarrolló. Dividió la línea de la costa en trece secciones, cada una de las cuales tenía su propio comandante y una flota propia. Cada comandante debía atacar simultáneamente las cuevas y escondites de los piratas de su sector. Mientras, Pompeyo, con una flota móvil de 60 naves, batía el MEditerráneo de Gibraltar a levante. Las escuadras de sus lugartenientes estaban formadas por entre diez y quince naves. La primera preocupación de Pompeyo fue lograr que los barcos de transporte de trigo navegaran de nuevo hacia Ostia, que hacía las funciones de puerto de Roma. En cuarenta días Pompeyo había limpiado el mediterráneo occidental de naves piratas. Todo acabará con el asedio de Coracesium, último y más consistente núcleo dónde los piratas habían logrado huir. En una operación espectacular y brillante, ejecutada a la perfección, tomaron la fortaleza.
Plutarco explica que, en cuestión de tres meses, se mató a unos diez mil piratas, el doble de estos fueron hechos prisioneros, y se capturaron 400 naves, y hundieron 1300. Más de un centenar de ciudadelas y refugios fueron capturados,y los arsenales depósitos de armas destruidos. Los prisioneros, sin embargo, no fueron crucificados, aunque era la pena habitual por piratería. Esta actitud formaba parte de la estrategia de Pompeyo para finiquitar la piratería, una suerte de experimento sociológico. Seleccionó meticulosamente los prisioneros que creía redimibles y los envió a ciudades del interior, lejos de la costa, con la esperanza de que se adaptaran a su nueva vida. Sabemos que no volvieron a la piratería, pero nada más.
Si hay un episodio peculiar en la historia naval antigua, sin lugar a dudas, es el protagonizado por Sextus Pompeius, hijo de Pompeyo el grande. Durante la guerra civil, los principales partidarios de Pompeyo se dedicaron a formar una gran flota con el objetivo de mantener la lucha por mar. Casio fue el encargado de buscar el apoyo de antiguos piratas de la costa de Cilicia (anda mira, esos a los que perdonó Pompeyo). Cuando el reclutamiento estaba a punto de acabar, Pompeyo murió en Egipto, o lo asesinaron, mejor dicho. Su hijo, Sextus Pompeius logró escapar de la persecución de César, y se unió a un grupo de piratas de la costa de Hispania, convirtiéndose en su líder. Poco a poco, los viejos enemigos políticos de César se fueron situando a su alrededor. Con la muerte de César, Sextus se dirigió a Marsella. El Senado le nombrará almirante y le retornará las propiedades de su padre.
En el 42 a.N.E., poco menos de dos años después de la muerte de César, Sextus comandaba 130 naves y estaba cerca de alcanzar su proyecto: el control del mar Mediterráneo. Marco Antonio y Augusto habían hecho esfuerzos para combatir a Brutus y Casio, que habían requisado las naves de Oriente. Todo lo que sobrevivió de aquella derrotada flota fue a parar a las filas de Sextus, un astuto y hábil adversario que dominaba las olas con una fuerza superior a doscientas naves en aquél preciso instante. Su flota se componía de elementos diversos que se fueron uniendo a lo largo del tiempo, aunque el núcleo eran barcos italianos que el Senado de Roma había puesto a su disposición cuando fue nombrado almirante. Después de la derrota de Casio y Bruto, esta se incrementará con las escuadras republicanas que habían sobrevivido. Nunca logró un tamaño superior a las 400 naves, si llega, y con todo, la gran mayoría acabaron siendo naves ligeras de piratería. Eso sí, Sextus disponía de tripulaciones veteranas y muy capaces, por lo que era un temible enemigo para los triunviros.
Sextus se convertirá en un peligro para Roma al controlar todas las rutas comerciales e impedir la llegada de mercancías. Será en ese momento que los triunviros deciden que deben acabar con su amenaza. En el 39 a.N.E. comenzará el conflicto. Al principio, los triunviros obtendrán una serie de derrotas consecutivas. En el 38 a.N.E., por medio de grandes tasaciones y utilizando dinero propio, Augusto encargará a Marco Vipsanio Agripa la creación de una flota de 370 naves, una fuerza marítima como no se había visto hasta entonces. Agripa ya había demostrado grandes dotes como general, y ahora hará lo propio como almirante. En primer lugar, Agripa buscó un puerto seguro dónde establecerse. A falta de uno natural, logró crear uno propio uniendo los lagos Averno y Lucrino, en el norte de Nápoles. Allí pasó el invierno entrenando a los reclutas rigurosamente. No obstante, sus hombres eran todavía unos principiantes y deberán enfrentarse a los veteranos excepcionalmente preparados de Sextus.
Con sus naves pesadas, Agripa sabía que no tendría la posibilidad de golpear las ligeras y rápidas embarcaciones del enemigo. La única salida que quedaba era el abordaje, pero esto suponía otro grave problema, y es que las naves enemigas pueden esquivar las suyas y huir. Pero Agripa lo resolverá inventando nuevas armas. Dado que sus naves eran suficientemente grandes para incorporar catapultas, decidió introducir unas de tipo ballesta, pero en lugar de disparar una lanza aguda, las sustituyó por unas acabadas en gancho. Con ello, no solo alcanzaba una distancia mayor que un gancho lanzado a mano, sino que también resultaba más difícil para el enemigo liberarse ya que no debían cortar una cuerda fina, sino un robusto palo de madera.
En septiembre del 36 a.N.E., después de algunos preliminares, las dos flotas se enfrentan. Entre ambas sumaban unas 600 naves. En Nauloquia, en la costa septentrional de Sicilia, se enfrentaron en una batalla dura e incierta en la que los garfios de Agripa resultaron ser el arma decisiva. Con esta victoria, la flota y todos los proyectos y ambiciones de Sextus murieron.
Siete años más tarde de la batalla de Nauloquia, se dirimen las diferencias entre Marco Antonio y Augusto. El acto final de este conflicto, oficialmente entre Roma y la egipcia Cleopatra, se jugó en el mar, en Actium actual Accio, al oeste de Grecia; en el Golfo de Arta. Allí la flota de Augusto se encuentra con la de Marco Antonio en septiembre del 31 a.N.E. La de Marco Antonio será la última de las grandes flotas helenísticas. No existe un acuerdo sobre la cantidad de naves que llevaba, quizá doscientas, o cuatrocientas, pero sí está claro que el tamaño de las mismas era mayor. Llevaba gran cantidad de trirremes y naves de tamaños monstruosos equipadas con artillería. El buque insignia era una nave de diez órdenes de remeros.
Frente a aquella flota se impondrá la de Octavio, comandada nuevamente por Marco Vipsanio Agripa y compuesta por entre cuatrocientas y seiscientas naves, según el autor. Los relatos de la batalla que nos proporcionan Plutarco y Lucio Cassio Dio, nos dan a entender que la batalla era idéntica a Nauloquia pero a la inversa, dónde Octavio poseía las naves ligeras y pequeñas pero la superioridad en número. Podemos deducir, por tanto, que tras la victoria contra Sextus, Augusto abandonó las flota en el Portus Iulius. Por tanto, seguramente equipó una flota nueva formada de pequeñas unidades, situando al frente de estas las liburnas (naves ligeras utilizadas sobre todo para piratería), que jugarían un papel muy importante. No obstante, Lucio Anneo Floro, un historiador del siglo II, nos dice que las naves de Octavio iban desde birremes a hecarremes. Equipadas con la lanzadora de garfios de Agripa, que ya le había dado la victoria en Nauloquia. Las dos flotas se habían equipado con una coraza de madera recubierta de hierro para protegerlas del espolón enemigo.
Por lo que se refiere a la batalla, quizá otro día la narro con más detalle, pero en resumen, las fuerzas de Augusto se lanzaron contra las de Marco Antonio y Cleopatra en Actium, cerca del estrecho de Corinto. Cuando Cleopatra huyó seguida de cuarenta naves egipcias, Marco Antonio, con sesenta naves más, la siguió. Esto le dio la victoria a Agripa. El destino del mundo romano se había jugado en el mar, y esta lección Augusto no la olvidaría. Con él se inaugura el Imperio Romano y, a su vez, la época de mayor gloria romana en el mar. La supremacía naval que construyó Augusto, y que ahora analizaremos con más detalle, se prolongó durante doscientos cincuenta años.
Para conservar aquello que acababa de conquistar, Augusto creó una flota completa bien organizada que se mantuvo durante dos siglos y medio por parte de sus sucesores. Tras la batalla, Augusto estaba en posesión de más de 700 naves, incluyendo las capturadas por Agripa a Marco Antonio. Los barcos grandes y pesados se consideraron demasiado difíciles de maniobrar y fueron destruidos.
Siguiendo el modelo de Pompeyo Magno en su afortunada y rápida campaña contra los piratas, Augusto dividió el mar en sectores y repartió entre dos flotas mayores y varias menores estos sectores. Cuando comienza la organización, Augusto decide situar una base en Forum Iulii, una colonia al sur de la Galia des dónde podía controlar las costas galas e hispanas, pero finalmente, seguramente por consejo de Agripa, escoge un puerto a cada lado de la península itálica. Miseno para la costa occidental, al norte de la bahía de Nápoles, y Rávena para la costa oriental, en el Adriático. Establecerá el cuartel principal en Miseno, con la misión fundamental de controlar el mar occidental, pero de alguna forma también el oriental. Mantendrá allí una flota con 10.000 hombres y 50 naves grandes, trirremes fundamentalmente, pero algún que otro cuatrirreme y quinquerreme, entre los que estaría la nave insignia. Desde allí patrullaban la Galia, Hispania, Mauritania, Cerdeña y Córcega. Las ruta de trigo más importantes también las protegía esta flota.
Los puertos secundarios, en el norte y a lo largo de la costa Italiana, en Córcega y Cerdeña, servían como bases óptimas para las unidades dedicadas a patrullar. El comandante al cargo de la classis missenum, el prefecto de la costa de Miseno, se convertirá en uno de los oficiales gobernadores más importantes del Estado Romano. Un ejemplo de estos prefectos fue Plinio el Viejo, quien murió al tratar de recoger supervivientes durante la erupción del Vesubio que sepultó Pompeya y Herculano. Cuando el emperador Claudio (41-56 d.N.E.) declaró Ostia como puerto de Roma, parte de la flota de Miseno se desplazó allí.
La otra flota importante fue constituída principalmente por trirremes, y estaba localizada en Rávena, en el Adriático. Su objetivo era controlar la actual costa eslava, los piratas de la cual habían provocado auténticos dolores de cabeza en tiempos remotos. Era menos importante que la flota de Miseno, aunque cuando era necesario ambas se unían y cooperaban. Esta flota patrullaba las costas de Epiro, MAcedonia, Grecia, el Mar Negro, Siria, Creta y Chipre. Se escogió Rávena porque se encontraba bien defendida por tierra, y en caso de necesidad, la flota podía remontar el río Po vía la Fossa Augusta, canal construído en tiempos de Augusto, para dar apoyo al ejército en caso de invasión por el norte de Italia. Estas flotas también cumplían la función de transporte de tropas.
Consciente de que con dos flotas fuertes en el centro del Mediterráneo no era posible proteger y vigilar todo el mar, Augusto creó toda una serie de flotas pequeñas dedicadas a patrullar las costas provinciales, combatiendo a la piratería, controlando el tráfico portuario y protegiendo las rutas comerciales. Estas flotas estaban formadas por naves ligeras y rápidas. Sus sucesores siguieron el ejemplo, situándolas allí donde Roma tuviera naves para proteger, y en los limes. Hubo flotas en el Danubio y en el Rin, por ejemplo.
Los marineros y los soldados que tripulaban las naves no eran ciudadanos romanos, por lo general eran griegos, fenicios, sirios, egipcios o eslavos, es decir, formaban parte de pueblos que durante siglos habían recorrido larga y ampliamente los mares y ríos. Entraban en la marina entre los dieciocho y veintitrés años por un período de veintiséis años como mínimo. Si lo completaban, obtenían la ciudadanía romana. Los remeros en Roma no eran esclavos, ni en Roma ni en otros pueblos anteriores.
En cuanto a la organización interna de la flota, encontramos que al frente de las flotas grandes tenemos dos funcionarios de la orden ecuestre, ocupando el cargo de prefecto de la flota. Estos funcionarios son de carrera, por lo que no tienen porqué saber nada del mar ni de la navegación, su posición es administrativa, y para ellos supone un peldaño más. Para suplir la incapacidad o desconocimiento marítimo de estos, existía un comandante de escuadra. Al frente de una escuadra tenemos al navarchus, que es un especialista encargado del comandamiento de estas, y está bajo el mando del navarchus princeps, que posee la comandancia táctica y técnica de la flota. Bajo el navarchus, encontramos el trieratics, que es el comandante de una unidad, y está auxiliado por un centurión. Éste tenía bajo su mando a los clasiarii, o marineros, cuando estaban en tierra. Por debajo del centurión existían varios suboficiales similares a los del ejército de tierra, por ejemplo, el gubernator, o jefe de pilotos; el proet, hombre de proa (o segundo); y el Keleuste, o jefe de la tripulación (el que marcaba el ritmo). Bajo dirección de este último encontramos a los clasiarii, o soldados de la flota (cuando están en el mar). También existían otros especialistas como los gavieros, carpinteros, timoneles o médicos. Las flotas secundarias no tenían un prefecto al frente, eran más pequeñas y poseían unos funcionarios de menor rango, según decidiera el gobernador provincial.
Los signos de cambios que producirán la caída de Roma se comienzan a ver durante el reinado de Marco Aurelio (161-180 d.N.E.), quien debió enfrentarse a una serie de tribus germánicas que comienzan a situarse al rededor del limes romano. La gran marina de Roma, como tantas otras cosas del Imperio, entrará también en decadencia. En el siglo III, su papel será minoritario. La caída del Imperio se decidirá en el Limes, con las legiones en primer nivel, y la función de la flota reducida al transporte rápido de tropas en los territorios que requerían intervención militar. Pero el colapso, el verdadero colapso, tendrá lugar dentro de las fronteras, en un proceso social y económico que pondrá las bases de lo que, siglos más tarde, llamaremos feudalismo.
Podemos nombrar perfectamente las evidencias de la crisis de las fuerzas navales romanas, comenzando por el 230 d.N.E., cuando retornan los piratas. Entre el 253 y el 257, tenemos constancia de la entrada de los godos por el Mar Negro y el Egeo para llevar a cabo sus saqueos. Habían formado una flota de 500 naves ligeras, y Roma logró expulsarlos. Pero dos años más tarde, regresaron y no encontraron resistencia romana. En el 284 d.N.E. Diocleciano dedicó esfuerzos y las flotas romanas fueron capaces de proteger y gobernar los mares de nuevo.
En el año 395, el Imperio se divide en dos, la mayoría de sus naves de guerra se quedan en la parte oriental, convirtiéndose en uno de los factores de la larga resistencia bizantina. No obstante, esto dejará vía libre a los vándalos, que se apoderaron del Norte de África, Córcega, Cerdeña y otras islas estratégicas, se convirtieron en una amenaza para Roma, que se quedaba sin su suministro de grano. Para el 450, se darán saqueos en Roma, la situación es peor que en la época de los piratas de Cilicia. Cuando Genserico, jefe de los Vándalos, muere, surge una nueva flota que restablecerá el orden en el mar. El mérito de esta flota provendrá de los pueblos de larga tradición marinera del Mediterráneo Oriental, especialmente los griegos. Como ya hemos señalado, uno de los factores fundamentales de la resistencia de Bizancio será su flota. Sin embargo, la de Bizancio es otra historia que no nos atañe ahora mismo.
Como decíamos al inicio de este artículo, siempre tenemos la concepción de Roma como pueblo terrestre, y ciertamente, es así. Sin embargo, hay que admitir que el Imperio Romano dio importancia al mar, y como consecuencia, a la armada. Tal es así, que aportaron grandes avances a las técnicas de navegación y de combate naval, así como mejoras en las naves. A nivel técnico, hemos hablado de algunos de los ingenios que implementaron, como:
Por otro lado, su aportación tuvo también mucho que ver en cuanto a la organización de la flota. Gracias a ella, fueron capaces de pacificar, proteger y controlar el Mediterráneo durante más de dos siglos. Hasta la actuación de Pompeyo, los actos de piratería eran inevitables. Roma no utilizó nunca la piraterçia como herramienta de Estado, al contrario, durante dos siglos la existencia de piratas quedó limitada a un nivel jamás visto hasta la actualidad en el MEditerráneo. El modelo organizativo de Augusto, en lo que respecta a la flota, que se basa en concentrar las grandes en dos puntos estratégicos y las pequeñas en el resto de puertos importantes, todavía es utilizado en los estados actuales. Estos concentran sus flotas en un número de puertos importantes, disponiendo de una o dos naves dedicadas al patrullaje, vigilancia y control en el resto de puertos.
La falta de mantenimiento de la flota como síntoma del colapso de Roma se tradujo en un acelerante a su caída. Sin ella, no fueron capaces de proteger las rutas del grano que abastecen a la ciudad, entrando en un círculo vicioso que cada vez genera mayor inestabilidad. Como ya se ha señalado, fue precisamente la flota uno de los elementos clave que salvaron a Bizancio de su temprana desaparición y permitieron al Imperio Romano de Oriente sobrevivir durante muchos siglos más.
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(1) Como nos comenta Tucídides I, 5,2 “Porqué antiguamente los griegos y los bárbaros, tanto los que vivían en la costa del continente como los habitantes de las islas, tan pronto comenzaron a tomar mayor relación por mar entre ellos, se dieron a la piratería. Eran comandados por poderosos caudillos, que buscaban su beneficio particular y el alimento de sus pobres seguidores. Caían sobre ciudades sin murallas y formadas de poblados dispersos, las saqueaban y el botín que obtenían era su principal medio de vida; porque este oficio no era deshonroso, sino que por contra les reportaba una cierta gloria. [2] Así lo prueba la conducta de algunos pueblos del continente para los cuales aún hoy son un honor las gestas de piratería, y el testimonio de los poetas antiguos, quienes en sus poemas hacen preguntar a los navegantes si son piratas, la cuál cosa implica que ni aquellos a quienes se pregunta tenían por indigno aquél oficio, ni los que tenían interés en saberlo se lo reprobaron”.
(2) Era un tipo de barco americano: link.
(3) Tanto este fragmento como el de Tucídides los he traducido de un trabajo que realicé hace mucho del catalán. Es posible que, si alguien busca ambos textos traducidos al castellano, la redacción no encaje con la que presento yo aquí. Pero no me voy a matar a buscarlos, dado que, para el caso, el contenido que nos proporcionan es el mismo.
(4) Eran unos mercenarios de origen itálico contratados en Campania, su lugar de origen, por Agatocles, tirano de Siracusa. Cuando este murió, muchos regresaron, pero otros se quedaron por Sicilia pululando hasta tomar Mesana (Mesina), expulsando a sus ciudadanos. Fue entonces cuando se autoproclaman mamertinos (hijos de Mamer, equivalente a Marte en osco).
(5) Se pronuncia coruus; la primera [u] hace función de consonante
Vamos a ver en los próximos días, a cuenta de las palabras de Milei, a mucha gente refiriéndose a este, a VOX y demás compañeros como fascistas. Veremos que la palabra fascista vuelve a usarse, desde mi punto de vista, sin demasiado rigor. Creo que ya es hora de desterrar el término fascista, y empezar a hablar de la ideología del odio.
Va a hacer ya varios años que, tras la aparición en el tablero político de VOX, Iglesias, en una rueda de prensa llamó a la alerta antifascista. En aquellos momentos, donde Iglesias todavía contaba con algunas de mis simpatías, me pareció una meada "fuera de tiesto". Hoy, no teniendo el personaje en cuestión ninguna de mis simpatías, le he de reconocer que tenía toda la razón. Eso sí, creo que debería haber dicho, para ser más riguroso, "llamo a la alerta contra la ideología del odio".
Y es que, creo que no puede definirse de otra manera la ideología que representa Milei, Vox, Trump, y tantos ultraderechistas (y gente como Ayuso, también). El neoliberalismo, que es lo que define a esta gente, más allá de otras connotaciones más asociadas a la derecha tradicional, es un tipo de ideología, que, tomando prestado la ocurrencia de un meneante en un comentario esta mañana, "tiene la escala de valores invertida".
Basta con escuchar las declaraciones de estos personajes, o a cualquiera de los que los apoya para darse cuenta de cuanto odio tienen dentro, y sobre todo, lo MÁS SIGNIFICATIVO, odio hacia el débil. No es casualidad que, a la par que defienden el egoísmo supremo, carguen siempre contra los más débiles; pobres (subvencionados), inmigrantes (delincuentes), mujeres (feminazis), animales, etc.
No pretendo, con ello, censurar que se pueda hablar de cómo se gestiona económicamente el estado, la política migratoria, o las políticas feministas, pero es que esta gente no quiere un debate sereno y sensato sobre esto, quiere destruir, quiere la enmienda a la totalidad. Te dicen que los impuestos son un robo, que la justicia social es una aberración, que los menas son delincuentes, que detestar lo que está ocurriendo en Palestina es ser proterrorista de Hamás, que defender cualquier medida que promueva la conservación del medioambiente es ser un "ecologeta".
Llegamos al punto que están cuestionando uno de los pilares fundamentales en los que se sustenta nuestra sociedad, que es la redistribución de la riqueza, y que es la que nos ha llevado a poder prosperar como individuos a la inmensa mayoría y dejar de ser sociedades feudales llenas de caciques que esclavizaban al grueso de la población.
Esta gente carga contra todo lo que implique que represente el bien común, que una sociedad esté más o menos cohesionada, que se proteja a los más débiles (los más débiles eramos el 90 % hasta hace nada) para que puedan prosperar y que haya cualquier vínculo que no vaya más allá de una relación económica. Quieren la ley de la selva, el sálvese quien pueda, la ley del más fuerte.
No es casualidad a quién defienden en lo que está ocurriendo en Palestina. No es casualidad que utilicen la estrategia del bulo de manera constante, no hay reglas, no hay una mínima ética. No es casualidad que siempre, siempre, se posicionen a favor del fuerte y en contra del débil.
Sabemos que hay personas que carecen de empatía, y que incluso disfrutan cuando ven a alguien en posición inferior pasarlo mal.
No sé cómo se puede llegar a frenar esto que está ocurriendo en tantos y tantos países. En España, en concreto, ya he perdido la esperanza de que en el PP alguien se digne a parar esta deriva, y pocas voces quedan, como las de Juan Manuel de Prada, denunciándolo.
Ya no se trata sólo de redes sociales, basta con hablar con alguna persona de carne y hueso que ha caído en esta ideología para ver lo lleno de odios que desgraciadamente están (conspiraciones, racismo, machismo, antiecologismo, etc.).
Me aterra pensar en un mundo donde esta mierda acabe llegando a la mayoría de la sociedad.
El texto original ha sido extraido y adaptado de este video:
If Republicans Said the Quiet Parts Loud to Workers
www.youtube.com/watch?v=e1JuUcPo5NQ
Buenas noches, empleados sin sindicato:
Quiero agradecer la invitación a la dirección de la empresa. También quiero agradecerles la labor a los secuaces pagados que mi partido trajo para sostener carteles y fingir ser trabajadores sindicales asistiendo a este discurso en una fábrica no sindicalizada por alguna razón. ¡Es fantástico! Todos vosotros, teóricos de la conspiración que pensáis que cada tiroteo masivo, ataque terrorista o guerra es una maniobra de manipulación psicológica, ¡estáis en una ahora mismo! ¡Felicidades! Y gracias de nuevo.
Y sobre todo, quiero agradecer a los medios de comunicación por informar sobre este evento como si fuera a hablar con trabajadores sindicales en huelga, a pesar de saber todo el tiempo que no iba a hacerlo.
Es bueno que no crea en saldar mis deudas, porque les debo a los medios de comunicación un gran favor. Sin su compromiso cobarde con la bipartidismo y la equidad escenificada amplificando mi retórica cargada de mensajes subliminales, normalizando mis creencias trastornadas y legitimando mis propuestas fascistas, no estaría aquí.
Voy a seguir atacando a los medios y actuando como si los odiara, porque estos ingenuos de mis votantes se lo tragan todo como si fuera agua, pero sabed que sin ellos, gente como yo tendría solo una fracción del poder político y cultural que tenemos. Dios los bendiga —no lo digo literalmente— mi supuesta creencia en Dios es una afectación cínica, pero entendéis lo que quiero decir.
Los progres, los liberales, los izquierdistas, los marxistas —uso esos términos indistintamente a pesar de saber que no son intercambiables, porque, de todos modos, vosotros, imbéciles, no conocéis la diferencia— los bolcheviques allí al otro lado, todos dicen que el partido libertario es el partido de los ricos, no de la clase trabajadora. Todos dicen que el partido libertario no tiene nada que ofrecer a los trabajadores. Bueno, como vuestro candidato libertario, estoy aquí para deciros... que están en lo cierto.
El Partido libertario no tiene nada que ofrecer a los trabajadores, no tiene interés en mejorar la vida de los trabajadores, no tiene políticas que puedan hacer algo bueno por los trabajadores. ¡Eso se debe a que el Partido libertario es el partido de los negocios! ¡Y cuanto más grande sea el negocio, más somos el partido de él! Si eres un trabajador de fábrica —o incluso un trabajador de oficina en la mayoría de los casos— ¡no trabajo para ti! Trabajo para tus jefes. Trabajo para los altos ejecutivos, miembros de la junta, inversores y dueños de tu empresa.
Quiero recortar sus impuestos aún más de lo que ya lo han hecho —y seamos honestos, los impuestos a los ricos en este país son escandalosamente bajos como están— no escandalosos para mí— deberían ser escandalosos para vosotros, si alguna vez pudierais permitiros dejar de trabajar lo suficiente como para prestar atención.
Quiero eliminar regulaciones —las hemos estado eliminando durante cuarenta años, ¡pero quiero eliminar aún más! ¡Quiero eliminar la burocracia gubernamental, es decir, quiero hacer legal y tan fácil como sea posible para que vuestros jefes los traten como quieran! ¡Sin normas de seguridad! ¡Sin atención médica! ¡Sin días de vacaciones! Vuestros jefes obtienen todo y vosotros no obtenéis nada porque no me importáis vosotros ni vuestras familias, ni siquiera si vivís o morís.
Dios bendiga nuestro país.
Entonces, ¿por qué estoy aquí hablando con vosotros en primer lugar? Es una maniobra publicitaria. ¡Gracias nuevamente por jugar!
Pero es más que eso. Es bastante simple: necesito que votéis por mí. Vivimos en una democracia —por el momento— estamos trabajando en eso, pero por ahora, seguimos viviendo en una democracia, así que necesito ganar elecciones. No me gusta más de lo que os gusta a vosotros.
En realidad, me gusta mucho menos que a vosotros — odio la democracia. Odio, joder, odio la democracia. Odio tener que salir aquí y hacer un espectáculo para vosotros, peones. Preferiría simplemente recoger la riqueza ilimitada y el poder incuestionable al que genuinamente siento que tengo derecho, pero desafortunadamente, no es el mundo en el que vivimos —todavía— y aquí estoy.
¿Por qué deberíais votar por mí, un político libertario? No hay una buena razón, pero algunos de vosotros lo haréis de todos modos, porque no importa cuán perjudiciales sean nuestras políticas para vosotros, cuán evidentemente desconectado esté de sus necesidades y cuán descaradamente despectivo y hostil sea hacia vosotros, tristes, sucios, quebrados. ¿individuos? Siempre puedo convencer a algunos de vosotros para que actúen en contra de su propio interés, y os diré cómo lo hago.
Apelo a vuestra vanidad. Os halago. Os trato con condescendencia. Os digo que sois la verdadera gente de bien. Os digo que vuestros pueblos pequeños, económicamente inertes, culturalmente muertos, son el verdadero país. Os digo que vuestra perspectiva aterrada, insular, asediada es objetivamente la correcta. Os digo que fueron personas como vosotros quienes construyeron este país y omito el hecho de que las personas que construyeron el país históricamente han sido las que menos se han beneficiado de lo que construyeron, lo cual es por diseño, me lo agradeceréis más tarde.
Estaba siendo retórico —no me agradezcáis más tarde ni intentéis hablar conmigo fuera de eventos de campaña preconvenidos y rígidamente controlados.
Veo esa actitud desafiante que lleváis, esa antipatía hacia ser agrupados, esa terquedad infantil y os digo lo que queréis escuchar. ¡No queréis que ningún sindicato deduzca cuotas de vuestro salario y no os dé nada a cambio! ¿Por qué deberían enriquecerse los líderes del sindicato mientras vosotros estáis aquí sudando en el trabajo? No queréis que ningún sindicato se interponga entre vosotros y vuestro empleador, diciéndoos qué podéis y qué no podéis hacer, diciéndole a vuestro jefe lo que puede y no puede hacer.
Ved, quiero que os enfadéis ante la idea de que un líder sindical hipotético se enriquezca con vuestro trabajo para que no os importe que vuestros jefes reales se enriquezcan con vuestro trabajo, dejándoos solo con las migajas. Y lo mejor de todo es que algunos de vosotros siempre, siempre, siempre caéis en ello, porque sois ignorantes y estáis desesperados, y sé que ese es el caso para la mayoría de vosotros, porque tenéis que ser ignorantes o desesperados, o ambos, para trabajar en una empresa no sindicalizada.
Apelo a vuestros miedos. Os diré que los libertarios salvan empleos nacionales y que los progresistas destruyen la economía, aunque históricamente hablando, eso es literalmente mentira.
Os digo que si estos sindicatos ganan aún más terreno en vuestra industria del que ya tienen, harán que construir en este país sea tan costoso que nuestras mayores empresas no tendrán más opción que externalizar todos esos trabajos y todas sus operaciones a otros países. Y os digo que la culpa es de los sindicatos y no de los altos ejecutivos que se pagan a sí mismos cientos de millones al año. Y lo creeréis porque realmente sois tan densos, y porque os gusta lo demás que tengo que decir.
Apelo a vuestro odio —oh, os encanta esta parte, ¿verdad? A mí también. Mirad esto: cuando los sindicatos obligan a las empresas a enviar empleos nacionales al extranjero, ¿a quién creéis que van esos trabajos? ¿A vuestros empleos? Van a países del tercer mundo —ya es suficientemente malo que vengan aquí a quitarnos nuestros trabajos, ¿ahora vamos a enviar nuestros trabajos allá? No mientras yo esté, diré, cuando la verdad es que casi todos los ejecutivos responsables de externalizar trabajos nacionales a países en desarrollo, donde es más fácil explotar la mano de obra barata, me votan a mí, me dan dinero y me mantienen en el poder porque estamos del mismo lado. Y si estuviera en su lugar, haría lo mismo, buscando cualquier manera de joderos y tomar un poco más de lo que os pago y ponerlo de nuevo en mi bolsillo.
Aquí hay otra:
¿No estáis cansados de llamar al servicio al cliente y tener que hablar con alguien de un país al otro lado del mundo? ¿Y hablan con un acento que no estáis acostumbrados a escuchar, lo que puede hacer que sean difíciles de entender a menos que realmente los escuchéis? ¿No lo odiáis? ¡Por supuesto que sí! Porque personas como yo os han estado animando a odiarlo casi todo el tiempo que habéis estado existiendo, razón por la cual puedo pararme aquí y decir algo como "No votéis por un progresista a menos que nunca queráis escuchar una voz de un nacional en el teléfono de nuevo" —y salirme con la mía, porque os preocupa más eso que cómo vais a pagar las compras en los próximos años a medida que el valor real de vuestros salarios sigue disminuyendo y disminuyendo y disminuyendo, malditos imbéciles.
Lo entiendo —yo también odio a la gente de otros países: inmigrantes, refugiados, hijos de inmigrantes y refugiados, personas negras, personas de color, personas de todos los colores que no sean el mío, incluso aquellos que simplemente viven en sus propios países, ocupándose de sus propios asuntos, tratando de ganarse la vida para ellos y sus familias. No los soporto, y si no los necesitara como fuente de mano de obra barata o para utilizarlos como chivos expiatorios para vosotros, idiotas, no pestañearía matando hasta el último maldito de ellos.
El despiadado y reaccionario racismo y la xenofobia son cualidades que comparto realmente con todos vosotros, pero trato de no pensar en eso, me resulta perturbador.
Apelo a vuestra debilidad por el pensamiento mágico —la mayoría de vosotros vais a la iglesia, así que sé que os gusta creer en cuentos de hadas. Aquí tenéis otro cuento de hadas: ¡el capitalismo de libre mercado! El gran cuento de hadas que os hemos estado vendiendo una y otra vez durante generaciones, como si alguno de vosotros tuviera la más mínima razón para emocionarse por el capitalismo de libre mercado. ¡No es para vosotros! ¡Es para los yos! Las sectas benefician a las personas que las dirigen, no a las personas que se unen a ellas.
¡Tenemos que reducir impuestos y regulaciones para liberar el poder y el potencial de las empresas nacionales! Eso es lo que digo en respuesta a prácticamente cualquier problema. ¿Cambio climático? ¡Reducir impuestos y regulaciones! ¡Liberar el poder de las empresas nacionales! ¿Pobreza? ¡Reducir impuestos y regulaciones! ¡Liberar el poder de las empresas nacionales! ¿Justicia penal? ¡Liberar el poder de las empresas nacionales!
¿Qué va a hacer reducir impuestos y regulaciones para empresas para abordar alguno de esos problemas? Nada. No va a hacer absolutamente nada. Pero suena bien, ¿verdad? Así como también suena bien cuando digo que solo quiero liberar el espíritu empresarial del pueblo y animar a las personas a comenzar un pequeño negocio. ¡Como si alguno de vosotros fuera a comenzar alguna vez un pequeño negocio!
Probablemente ni siquiera queráis comenzar un pequeño negocio. Pero suena como si estuviera luchando por vosotros cuando lo digo, ¿verdad? No lo estoy haciendo, sin embargo. No estoy luchando por vosotros, ¿por qué lucharía por vosotros? Ni siquiera os considero personas reales. Sois como animales en un zoológico para mí. Si estoy sintiendo realmente pensativo, lo cual no ocurre a menudo, podría pasar unos segundos preguntándome qué tipos de pensamientos vagan por vuestros cerebros mayormente en blanco mientras estáis sentados en vuestros hogares en equidad negativa, machacando puñado tras puñado de patatas fritas en vuestras caras mientras miráis horas y horas de televisión de realidad sin sentido, pero eso es todo.
No me importáis. No tomo en cuenta vuestros sentimientos ni vuestros intereses cuando tomo decisiones. Solo quiero vuestra conformidad, vuestro trabajo y vuestro dinero. Por eso quiero eliminar el salario mínimo, por eso quiero endeudar a tantos de vosotros como sea posible, por eso estoy yendo tras vuestros beneficios de atención médica, por eso estoy yendo tras vuestra jubilación, por eso estoy yendo tras vuestro seguro social y medicare. Y estáis tan jodidamente perdidos de cuello para arriba que aún pensáis que estoy de vuestro lado, por eso voy a obtener todas esas cosas, porque eventualmente las entregaréis.
Gracias por vuestra credulidad, gracias por vuestra estupidez deliberada, y una vez más, gracias a todos vosotros en las noticias por transmitir esto, por hablar de esto, y por tratarme como a un candidato normal de un partido político normal en lugar de un fascista declarado al que todos deberían temer. ¡Malditos seáis! ¡Maldito el país! ¡Sí! Voy a aplastar a cada uno de vosotros si es lo último que hago, patéticas bolsas de mierda.
menéame