Las farmacéuticas son la última gran estafa de la crisis. El pasado año sus inversores son los que más dinero han ganado gracias a la especulación y la usura. La hepatitis C es el mejor ejemplo de cómo las farmacéuticas sacan la sangre a los enfermos con la aguja de los gobiernos. Un laboratorio, controlado por bancos y fondos, impone precios demenciales que los Estados aceptan porque la banca manda.
|
etiquetas: medicamentos , farmaceuticas , sovaldi , hepatitis , c