Es el objetivo de las democracias: dejar que el pueblo escoja su destino y participe de forma directa o indirecta en las decisiones del Estado. Por eso lo lógico sería que, a más herramientas para que la ciudadanía pueda ejercer su voluntad, más justo sería el sistema. Pero sabemos que lo contrario también pasa. Cada vez que aparece un resultado electoral no satisfactorio, salen voces diversas denunciando el error de la ciudadanía. La gente se equivoca. Vota mal.
|
etiquetas: suiza , california , democracia , directa , consecuencias , referendums