Reventaron la puerta de la sala de partos y empezaron a atizar a todo el que se cruzaba por delante y a destrozarlo todo, con total impunidad. Un grupo de ocho personas agredió, este miércoles, al personal sanitario del Hospital de Terrassa y rompió material del centro, con mucha brutalidad. Según los testigos, los agresores acompañaban a una embarazada y se enfadaron porque la visita no salió como pensaban que iría. El ataque afectó a dieciséis trabajadores del hospital, de estos cuatro sufrieron problemas psicológicos graves