Según un nuevo informe, las mujeres de Corea del Norte son sometidas sistemáticamente a violencia sexual por parte de funcionarios del gobierno, guardias de prisiones, interrogadores, policías, fiscales y soldados, y los avances a tientas y no deseados forman parte de la vida cotidiana de las mujeres que trabajan en los florecientes mercados negros del país. El carácter generalizado de los abusos cometidos por funcionarios de Corea del Norte se documentó en un nuevo informe de Human Rights Watch que entrevistó a 54 personas que huyeron de Corea
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