El envejecimiento de la población es un reto de primer orden para las cuentas públicas. Es más, puede que sea el reto más exigente al que se ha enfrentado el modelo de bienestar español en muchos años. Y es que, si las estimaciones más recientes se cumplen, puede llegar a elevar el gasto público en más de 20.000 millones cada año durante tres décadas y poner en jaque al sistema público español.
|
etiquetas: demografía , gasto público