Nuria Alonso pidió auxilio reiteradamente antes de ser asesinada presuntamente por su exmarido el pasado martes. En al menos dos ocasiones, acudió a los servicios sociales. Primero a los de Maracena, su localidad, y más tarde a los de Granada, sin que recibiera ayuda en ninguno de los dos centros. Pero, durante este tiempo, también confió en la Justicia. Denunció a su agresor en 2016 por impedirle que entrara en su casa, la que compartía con su marido, pero aquello no fue a más: quitó la denuncia por quitó la denuncia por presiones de su pareja
|
etiquetas: asesinato , violencia de genero , macarena