"Los turistas británicos que viajen a España este verano podrían encontrarse con bares y restaurantes cerrados debido a la escasez de personal", alertan en el periódico británico Metro, señalando que algunos bares y restaurantes en centros turísticos populares como Benidorm ya han tenido que reducir su horario o cerrar durante días enteros debido a la falta de personal. Los británicos remen que el precario mercado laboral español acabe afectando a lo que más quieren: unas vacaciones con Sol, buenos servicios y precios bajos.
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