Para lo único que escribo a mano, es para firmar el voucher de la tarjeta de crédito al pagar, o anotar un recado rápido de una llamada.
Cuando me piden escribir un párrafo de lo que sea, la mano me duele y el brazo me cansa terriblemente.
En realidad, se debería complementar ambas cosas. Pero mi vida diaria se ha desviado considerablemente a PCs, tablets y smartphones (y controles remotos).
Yo diría que toda Latinoamérica, pero tiene razón.
Una cosa es que te EDUQUEN y otra cosa es que te ENSEÑEN.
Y como él dice al final: No se trata de ampliar el contenido, sino el contexto.
Que no sepa programar no lo hace más inútil, y que sepa programa no lo hace un dios. Hay gente a la que le gusta, y gente a la que no. O sino, ¿dónde quedarían los IT Pro, los administradores de red, de seguridad, de bases de datos? ¿Los gerentes de proyecto, los testers, los analistas de calidad? ¿Acaso todos ellos DEBEN programar? No. Deben conocer la lógica de lo que el cliente quiere, pero no necesariamente CÓMO hacerlo. Allí es cuando se necesita gente que le APASIONE programar, independientemente de su título.
Sacar programadores de las universidades es un negocio para ellas, pero no para el mercado. Y no se molesten si las empresas solicitan gente con experiencia en una tecnología específica. ¡Es su negocio, y si consideran que se necesita trabajar en alguna de ellas, es porque tienen el cliente que así lo desea! ¿O sea, que como tienes el conocimiento básico de programar, te voy a contratar aunque no sepas de trabajar en iOS (por ejemplo)? ¡NO! Y más, cuando el proyecto que tengo en mis manos se necesita que se ejecute pronto! No me puedo poner a enseñarte. Debiste especializarte en algo.
Aquí hay imbéciles que no tienen NI IDEA de lo que se sufrió en Colombia con ese tipo.
ETA no se le puede comparar, las FARC y ETA sí vienen siendo lo mismo. Pablo Escobar era otra cosa.
No sé si se le pueda catalogar de asesino en serie, pero sí un asesino a sangre fría que no le temblaba la mano para acabar con todo aquel que se le atravesara en su camino.
Y tienen razón algunos: el gobierno tuvo mucha responsabilidad en casos en que debía proteger a la ciudadanía. Reaccionaron demasiado tarde, fueron muy condescendientes con las exigencias de este tipo y en ciudades como Medellín y Bogotá, era un problema salir a la calle, porque era muy probable que cualquier carro estacionado fuera a estallar de un momento a otro.
Y la serie que hicieron, se ajusta bastante a lo que ocurrió. Aunque, como todo programa actuado, no faltan las escenas de relaciones personales e íntimas. No la desprecien por eso.
Y si no les gusta, lo que hay son documentales de la época al respecto.
Y por último, sí. La mayoría de los políticos que alcanzan la presidencia, tienen relación directa o indirecta entre los que ya la alcanzaron. Ese es otro gran problema de este país, pero a la gente parece no importarle.
Desde acá, palmas y ovación de pie para el troll de los comentarios #3, #6 y #9. Haciendo honor a su username.
Has logrado tu cometido, muchacho. Regodéate en tu triunfo.