#163 Todo el mundo sabe que mientras estás picando piedra, poniendo ladrillos o cualquier cosa que se te ocurra que no sea en una oficina tranquilito (y sin atender al público) puedes coger el movil
#113 No, en Cataluña se hablaba catalán un par de siglos antes que en Valencia. Hasta la conquista de Jaume I y la creación del reino de Valencia no se hablaba catalán alli. #135
#106 Pero es una forma de no herir los sentimientos del otro. A mí ese chaval no me gustaba ni como amigo, no era interesante en absoluto, pero cuando me dijo si podíamos ser amigos, le dije que sí, para que al menos se llevase la autoestima intacta. Quizá hice mal y debí haberle dicho "no, lo siento, pero ni siquiera como amigos. Prefiero que nos limitemos a darnos las buenas tardes, y si podemos suprimirlo y hacer mutuamente como que el otro no existe, mejor aún".
La dependencia emocional también es responsabilidad de uno. A no ser que estemos hablando de niños de trece-quince, uno ya es mayorcito y debe aprender a quererse a sí mismo, no rebajarse por alguien a quien SABE que no le importa un comino. Como dije, estuve en el otro lado también. Él se aprovechó en algunas cosas pequeñas, algún favor... yo pensaba que yo lo hacía porque quería, porque me gustaba mucho y hacerle favores me hacía sentir bien. Cuando me pidió sexo "como amigos" y me dejó caer que necesitaba probar la tarta antes de comprarla, ya me negué. Porque eso sí hubiera sido abusar de mí, y no estaba dispuesta a consentírselo. Y yo no seré el no-va-más de la resiliencia, antes bien aguanto carros y carretas antes de saltar, pero se trata de ponerse uno mismo en su lugar.
#104 Una cosa es jugar con los sentimientos de una persona y otra una supuesta friendzone. No es lo mismo. A mí me ha tocado estar en los dos lados (supongo que como a muchos), y por más que dejé claro, meridiano, superclaro que no quería nada con él ni lo querría nunca, tuve que acabar quitándole de redes y esquivándole de todas partes porque si simplemente le preguntaba qué tal estaba o cómo había pasado el finde, "le estaba mandando señales erróneas, eso no lo haces si una persona te da igual", y la mala era yo, y yo jugaba con sus sentimientos cada vez que sacaba un paquete de chicles y, para ser educada, ofrecía a los de mi alrededor entre los que estaba él, o me ponía falda para ir a currar.
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Gracias. 
