En la cuestión de la carta de Sánchez tenemos tres relatos.
Para la ultraderecha, se inventaron bulos sobre la pareja de Ayuso, es totalmente inocente, sin embargo, Begoña Rodríguez es totalmente culpable (de hecho, ¿qué tiene que ver Ayuso con esto?).
Para la izquierda, el tal Alberto González es culpable y, como defensa, la derecha enfanga a la mujer del presidente.
Por último, desde la derecha otra vez, y este me parece que es el relato que está calando, igual el ayusado se llevó algo, pero la Begoño también, todos son iguales.
¿Cómo saber, o cómo convencer, de qué relato es el que se acerca más a la verdad?
Comentarios
1_# "La izquierda se queja de que vayan a por Begoña, pero les parece bien que vayan a por la pareja de Ayuso o la mujer de Feijoo, lo cual es, a todas luces incoherente."
Joder, si es que no llegan ni a chiste. Así que, no sé, revísate los pañales.
Yo creo se te pasa un detalle por alto: al fantasma que se trinca a la Ayuso le van a poner el culo como la bandera de Japón y lo de la otra será una sucesión de titulares que finalmente quedará en agua de borrajas porque no hay nada. Si tuvieran algo de verdad no hubieran esperado a sacarlo en plan vendetta, lo que tienen es lo de siempre: una capacidad infinita de soltar mierda por la boca, en prensa TV... Y un ejército de hijos de puta a sueldo para ello que ni se enteran de nada ni se quieren enterar mientras sigan amarrados a esa teta que les alimenta de pus infecta.
Como con Iglesias, Montero, Rossell, el otro Rossell que se chupó 2 años de prisión preventiva porque a una hija de puta le habían prometido plaza en no sé donde, Monedero, los indepes... en una palabra, España. Y quedará alguno que se sorprenda porque los indepes quieran largarse.
Pero tú te crees que en cualquier país, ya no decente, sino que pretendiera dar una mínima imagen de decencia, sólo la imagen, ¿se mantendría a un tipo en antena que publica una noticia falsa a sabiendas bajo el lema de "es muy burdo, pero vamos con ello"? Vaya que si es burdo y vaya que si van con ello, pero más grave aún es que todavía se la cuelen a alguien.
Quiero decir que, para no haberse dado cuenta aún de lo que hay, hay que tener las neuronas justas para no cagarse encima. Ah, sí, y el caso neurona!
Y conste que no pongo la mano en el fuego por la honestidad de la tal Begoña, ni falta que hace, la pongo por la podredumbre de sus denunciantes. Eso sí que es seguro.
Basta con saber que al que tenía que reformar al PP, que le habían regalado una etiqueta de anís del mono en la rey juan carlos, le echaron por honesto
Hoy en día el que no se entera es porque no quiere o no le interesa.
#4 No me parece que el compañero quisiera afirmar tal relato, sino que más bien lo estaba mostrando, por lo que, sin acritud, no hacía falta que lo insultases.
Voy a proponer otros tres relatos:
1) Para la "ultraderecha" lo que haga la pareja de Ayuso no debe afectar a Ayuso, pues afecta al ámbito estrictamente privado y lo que haya trincado es irrelevante y no debe salpicar a la presidenta.
2) Para la izquierda ir a por la mujer del presidente es un claro caso de "lawfare": una actuación de la extrema derecha en connivencia con la judicatura fascista, sin ningún fundamento y que debería haber sido directamente archivada.
3) La última posibilidad, también desde la perspectiva de la derecha -es decir todo lo que no sea PSOE, izquierda a la izquierda del PSOE o nacionalistas/independentistas afines al gobierno- es que la pataleta del presidente es ridícula e infantil, pues todos los políticos juegan al mismo juego sucio, se sirven de prensa afín para enmierdar la batalla política y no dudan en atacar al contrario sin importar de qué manera. La izquierda se queja de que vayan a por Begoña, pero les parece bien que vayan a por la pareja de Ayuso o la mujer de Feijoo, lo cual es, a todas luces incoherente.
Creo que tus tres relatos también hay gente que los compra, pero, en general también creo que la gente no es tan simple. Creo que mis propuestas añaden algo de complejidad.
#1 Estoy de acuerdo con tu análisis, gracias por comentar. Yo sinteticé demasiado, no obstante, sí creo que hay mucha gente muy simple...
Por otro lado, en lo que se refiere a la primera opción, si dicen eso de Ayuso, deberían aplicarlo también a Sánchez, ¿no? No me parece que lo hagan...
Y por último, escribí esto pensando que alguien me diese alguna indicación para saber qué camino se acerca más a la verdad (yo tengo una creencia, pero no pasa de eso) y nadie me ha respondido...
#2 No hay un GPS pero hay muchas señales.
No parece que la tal Begoña esté devolviendo varios miles de euros a hacienda que ni siquiera le aceptan porque ya la han empurado
Por otro lado, la credibilidad de los denunciantes brilla por su ausencia y por lo que parece la denuncia está más desustanciada aún que quienes la presentan.
Es más difícil explicar como llegar a las conclusiones que alcanzarlas, en realidad tiene bastante de obvio, es cosa de tenerlos un poco calados. Claro que, si uno aún no ha caído que lo único cierto que publica Ok Diario es la fecha, pues tampoco hay mucho que hacer.
Como orientación te diría que el primer relato es falso, el segundo cierto y el tercero es el de los "agnósticos" que prefieren no mojarse desde la ignorancia y que aceptan pulpo como animal de compañía. Es un poco esa equidistancia que pone al mismo nivel a colonos israelíes y palestinos cuando es evidente quién está robando a quién.
Pero no sé si procede buscar un razonamiento para gente que genera sus opiniones en base a la ausencia del mismo.
Por otro lado nunca se puede poner la mano en el fuego, pero desde luego sí se puede decir que tiene toda la pinta. Hay cuestiones harto más complejas, esto cae más bien por su propio peso.
#3 "no sé si procede buscar un razonamiento para gente que genera sus opiniones en base a la ausencia del mismo"
Pues sí, al final es el típico "don't feed the troll".
Todo lo que dices tiene sentido e ilustra mi propio pensamiento (y creo que el de muchos).
Supongo que al final es algo obvio y no hay dilema alguno, el problema no es tanto la dificultad en discernir entre un problema y otro, sino que determinados discursos absurdos calen en la sociedad.
Por tomar tu ejemplo, no importa lo absurdo que sea defender a Israel, hay quien lo hace, y esto implica muchas veces, el costo de miles de vidas.