Al igual que mucho tiempo estuvieron de moda esas imágenes estereográficas en las que uno tenía que “hacer bizco” para poder ver la figura oculta, las portadas de discos escondían elementos secretos. Había más en una portada de lo que era evidente. Y es que siempre nos ha gustado desentrañar cosas escondidas que están allí para que hagamos el mágico esfuerzo de verlas.
|
etiquetas: discos , portadas