La ofensiva del PP contra Ribera pone en cuestión de nuevo la estrategia de Alberto Núñez Feijóo, que también en esto se ha involucrado de lleno, convirtiéndose en el principal portavoz de los ataques. Sus colegas europeos le han dejado caer y su liderazgo se debilita cada día que pasa y su debilidad ya no es solo interna, esta vez, y porque el PP así lo ha querido, ha llegado también a Europa.