Varias mujeres han revelado en los últimos días que sufrieron acoso sexual por parte del sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos. El detonante ha sido la publicación de un informe sobre acoso en la Universidad de Coimbra que dedicaba un capítulo al profesor y le acusaba por estos hechos. Dicha universidad le ha suspendido temporalmente de sus funciones y ha iniciado una investigación. Tras conocer estas denuncias, Público ha dejado en suspenso la colaboración que mantenía con De Sousa Santos hasta que se resuelva la investigación.
Colombia está en llamas. Actualmente es uno de los países con más número de muertos por covid-19, ocupando el cuarto lugar en la región después de Estados Unidos, Brasil y México, teniendo hasta la fecha tan solo el 3,5% de la población totalmente vacunada y siendo parte de los países que se niegan a apoyar la solicitud de liberación de las patentes de las vacunas. Es también el país que en 2020 contó con el 42,5% de su población en condición de pobreza monetaria y con el 15,1% de la misma en condición de pobreza monetaria extrema.
Entrevista al sociólogo portugués, referente de los movimientos populares en América Latina. El arribo del capitalismo en su fase más violenta y los errores de los gobiernos progresistas que favorecieron la restauración conservadora: pactos con el sistema, corrupción y falta de formación ciudadana.
Hace pocas semanas la editorial Icaria publicó un libro del maestro Boaventura de Sousa Santos que debería leer toda persona que se considere de izquierdas, particularmente si forma parte de la dirección de un partido político o ejerce algún tipo de liderazgo en los llamados movimientos sociales. La razón es simple: en tan sólo 150 páginas el maestro, a quien tenemos el privilegio de leer a menudo aquí, da algunas claves para que la izquierda deje de mirarse el ombligo y vuelva a ser una herramienta útil para la gente común.
Con la aparición de los Estados modernos, las parcelas del poder quedaron divididas al modo que conocemos. Por eso el fenómeno de la politización de la justicia no es nuevo en absoluto. En sus últimas tres etapas, la del Estado liberal, el de bienestar y la actual, se ha producido una enorme expansión administrativa que creó las bases para una corrupción de nuevo tipo que descansaba sobre el nombramiento de cargos, la gestión de gigantescos recursos, la concesión de contratos. Es un fenómeno antiguo pero de mayores dimensiones.
Democratizar la revolución y revolucionar la democracia no son tareas sencillas, pero constituyen la única vía para frenar el camino al crecimiento de las fuerzas de extrema derecha y fascistas que van ocupando el campo democrático, aprovechándose de las debilidades estructurales de la democracia liberal. La miseria de la libertad será patente cuando la gran mayoría de la población solo tenga libertad para ser miserable.
"...estoy alarmado con la parcialidad de la comunicación social europea, incluyendo la portuguesa, sobre la crisis de Venezuela, una distorsión que recorre todos los medios para demonizar un gobierno legítimamente electo, atizar el incendio social y político y legitimar una intervención extranjera de consecuencias incalculables. (...) Sin injerencia externa, estoy seguro de que Venezuela sabría encontrar una solución no violenta y democrática."
El sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos recuerda que "desde el siglo XV, Europa se ha imaginado como un centro que tiene sus fronteras y es suficientemente fuerte para definirlas". El académico altermundista propone otra manera de pensar el conocimiento, saliendo de los prejuicios europeos para incorporar saberes más diversos.
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“Es posible que mañana tengamos que volver a las luchas ilegales”, al final es posible que el fascismo, que ya está instalado, substituya a la democracia en el próximo período. Las luchas pueden tener que ser llevadas a cabo “por dentro y por fuera del Estado, podrán ser constitucionales y no constitucionales”