En sus 30 años de existencia, el superpetrolero Seawise Giant ganó varios títulos: buque más grande del mundo, más pesado del mundo, de mayor capacidad, o mayor vehículo que jamás haya existido. Le era imposible entrar a muchos puertos o atravesar el Canal de Panamá o de Suez. Tenía una longitud récord de 458,45m y 68m de manga. Cargado pesaba 657.000 toneladas y quemaba 220 toneladas de combustible al día. Necesitaba 8km para frenar por completo y 3km para virar. En la guerra contra Irán, el Irak de Sadam lo bombardeó y se hundió entre llamas.

La ONU ha iniciado una compleja operación para trasvasar crudo del superpetrolero Safer en descomposición, varado frente a las costas de Yemen desde 2015. Durará 19 días, bombeará más de un millón de barriles hasta otro navío cercano. "La ONU ha iniciado una operación para desactivar lo que podría ser la mayor bomba de relojería del mundo", declaró António Guterres, Secretario General de la ONU, cuyos funcionarios advierten de que el Safer, de 47 años y que contiene 4 veces la cantidad de crudo derramada por el Exxon Valdez, se rompa y explote.

Lleva 8 años varado en las aguas del mar Rojo, frente a la costa de Yemen. Su armazón, carcomido por el sol y la salitre, permanece abandonado en un país convertido en el patio trasero de las disputas regionales, completamente arrasado por la hambruna y enfermedades. El FSO Safer, un superpetrolero con más de un millón de barriles de crudo en sus bodegas. En busca de una solución, la ONU ha optado por una salida inaudita: adquirir la propiedad del buque y, campaña de mecenazgo en marcha, prepara la costosa operación de rescate.

Al menos 77 personas han resultado heridas y 17 bomberos se encuentran ahora mismo desparecidos debido al enorme incendio declarado en el puerto de superpetroleros de la ciudad cubana de Matanzas, a unos 80 kilómetros al este de La Habana.