La otitis externa aguda se define como una inflamación de la piel del conducto auditivo externo (CAE), producida en general por gérmenes gram negativos, como Pseudomonas aeruginosa, y gram positivos como Estafilococo aureus. Su diagnóstico se establece por la presencia de síntomas de instauración rápida, como otalgia, acompañada de prurito, sensación de plenitud y en ocasiones disminución de la audición. En la otoscopia se objetivan signos inflamatorios en el conducto auditivo externo.