El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, declaró el miércoles durante una visita a Washington que su país no quiere una guerra en Líbano, pero que puede devolver a ese país a la «Edad de Piedra» si fracasa la diplomacia. «Hezbolá comprende muy bien que podemos infligir daños masivos», añadió. Gallant desveló que Israel ha matado a más de 400 «terroristas» de ese movimiento respaldado por Irán en los últimos meses.

“Con el artículo publicado ayer, pasamos de violaciones aéreas por parte de aviones israelíes a guerra psicológica a través de artículos escritos. Y hoy probamos la falsedad de esos artículos”, dijo el ministro al finalizar una visita abierta al aeródromo en respuesta a la publicación.

Funcionarios estadounidenses temen que, en caso de guerra total entre Israel y Hezbolá, el grupo militante respaldado por Irán pueda superar las defensas aéreas de Israel en el norte, incluido el célebre sistema de defensa antiaérea Cúpula de Hierro, según han declarado tres funcionarios estadounidenses a CNN.

El jefe del Hezbolá libanés, Hasan Nasrallah, advirtió que “ningún lugar” de Israel estaría a salvo de los misiles del grupo islamista si el gobierno israelí pusiera en práctica sus planes de ofensiva contra Líbano. “El enemigo sabe muy bien que nos hemos preparado para lo peor (...) y que no habrá ningún lugar (...) al resguardo de nuestros cohetes”, afirmó Nasrallah en un discurso televisado, agregando que los disparos contra el Estado hebreo podrían efectuarse desde “tierra, aire y mar”.

Medios hebreos revelan que un soldado israelí se suicidó en una vía pública apenas dos días después de regresar de la guerra en la Franja de Gaza. El sitio Hadashot Bezaman ha informado este lunes que un soldado de las fuerzas de reserva del régimen de Israel, un joven de 21 años residente del asentamiento de Or Yehuda, se quitó la vida por el cúmulo de problemas psicológicos y mentales que experimentaba.

"El incremento de la agresión por parte de Hezbolá nos lleva al borde de lo que podría ser un conflicto amplio, uno que podría tener consecuencias devastadoras para Líbano y la región", ha dicho el portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, quien ha detallado que el grupo ha lanzado más de 5.000 cohetes, misiles anticarro y drones en los más de ocho meses de conflicto.

Beirut, 10 jun (EFE).- El grupo chií libanés Hezbollah anunció este lunes haber atacado con varios aviones no tripulados un cuartel general del Ejército israelí ubicado cerca de la ciudad de Nahariya, a unos 10 kilómetros de la frontera común donde se suele concentrar el grueso de la violencia.

La Agencia Nacional de Noticias del Líbano (ANN) informó de que esta tarde aviones pertenecientes al Estado judío sobrevolaron a baja altitud el sur del país y rompieron la barrera del sonido “en diferentes intervalos”.

Hezbolá ha declarado que las operaciones se produjeron como respuesta a la agresión israelí contra el Líbano y los civiles libaneses, así como en apoyo del pueblo palestino y su resistencia.

Hezbolá anunció que ha atacado una base de la inteligencia aérea y un cuartel general en el norte de Israel, en respuesta a 2 bombardeos selectivos perpetrados hoy contra 3 vehículos en el sur del Líbano, donde murieron varias personas. Explicó en sendos comunicados que lanzaron cohetes 'Katyusha' contra la comandancia "de la Brigada Este 769" en la ciudad de Kiryat Shmona, y 5 minutos después misiles y artillería contra la sede de la Unidad de Vigilancia Aérea en Meron, en respuesta a 2 bombardeos israelíes perpetrados en las últimas horas.

Durante una sesión en el subcomité de Relaciones Exteriores del Senado, el republicano Marco Rubio afirmó que existen múltiples casos en las Américas de lazos entre los grupos criminales transnacionales (TCO) y “las organizaciones terroristas extranjeras”. “Estamos muy preocupados por las operaciones de Hezbolá en toda la región, así como en Chile”, afirmó Mark Wells, subsecretario adjunto para América Latina y el Caribe en el Departamento de Estado.

El Presidente Biden ha enviado a sus principales asesores a Oriente Próximo con un objetivo crucial: Evitar que estalle una guerra total entre Israel y el grupo militante libanés Hezbolá. Israel ha dejado claro que considera insostenible el intercambio regular de disparos entre sus fuerzas y Hezbolá a lo largo de la frontera y que pronto podría lanzar una operación militar de gran envergadura en Líbano.

Altos cargos del Gobierno estadounidense temen que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, pueda expandir el actual conflicto en Gaza hasta una guerra en firme contra Hezbolá en Líbano para intentar alargar su vida política entre la ola de críticas recibidas por la lentitud de la respuesta de seguridad a las masacres de las milicias palestinas del 7 de octubre.