En definitiva, más de 50 gallegos de Miami ayudaron a costear la obra y toda la logística. Los nombres de todos ellos están esculpidos en la base del cruceiro. La Xunta de Galicia también colaboró con los promotores de esta iniciativa, que esperan inaugurarla próximamente con la presencia del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. Castelao decía que “onde hai un cruceiro, houbo un pecado”. En Galicia hay 12.000, uno de los más famosos es el O Hío.
En este ámbito ha enmarcado la instalación del crucero, "un símbolo de Galicia" y "una acción cultural" que representa el 0,1% de los 16 millones de euros de presupuesto que tiene el departamento y que "sí cumple con la ley de galeguidade". Sobre esto, el diputado socialista ha advertido que "sería más barato plantar un árbol, que también es muy representativo de Galicia" y ha señalado que no entiende como el crucero va a favorecer el turismo o el comercio.
El destrozo accidental del cruceiro en Madrid es anecdótico. La repercusión posterior de este suceso no lo es. La exagerada reacción de Vox, Ayuso y Feijóo es un perfecto ejemplo de vandalismo contra la convivencia, un ataque incívico más dañino para la sociedad que lo que un simple borracho puede provocar.
No dejes que la realidad te estropee una buena diatriba. Este fin de semana, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y otros políticos como el eurodiputado ultraderechista Jorge Buxadé, han presentado la caída de un cruceiro en Madrid como una suerte de ataque al cristianismo. Relacionada:menea.me/215jw
Ayuso, Feijóo y un eurodiputado de Vox hablan de un ataque a los valores cristianos por el derribo de la cruz mientras Abogados Cristianos anuncia una querella. Los testigos de los comercios de alrededor aseguran que un joven lo tiró sin pretenderlo
El destrozo del Cruceiro, un obsequio del pueblo gallego a la ciudad de Madrid y situado en la céntrica plaza de Jacinto Benavente, ha llegado hasta las más altas instancias de la política madrileña y gallega. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha señalado que "este delito debe investigarse y poner a los culpables ante la ley" y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha anunciado que se restituirá con "un nuevo símbolo más resistente y duradero".
La nueva normalidad se parece tanto a la vieja normalidad que asusta. Un grupo de “vándalos” bajo los efectos del alcohol destrozaron ayer, a plena luz del día, el ‘cruceiro’ de la Plaza de Benavente, en pleno centro de Madrid. Se trata de un monumento al apóstol Santiago donado en 1982 a la ciudad por el Centro Gallego de Madrid, sito en el edificio de la calle Carretas esquina con la citada plaza. «Lamentamos la pérdida, pero el ‘cruceiro’ está a cargo del Ayuntamiento desde que se peatonalizó la calle Carretas».
La mayoría de las veces, este tipo de actuaciones afectan a monte comunal sin que nadie se atreva a levantar la voz contra el gran evento de las verbenas parroquiales. Ocurre que es más difícil disimularlas cuando los árboles que sufren las ansias de fiesta de los vecinos están situados en pleno centro del pueblo, como ocurrió este verano en Ponte Caldelas. La agresión a la fronda fue tan indiscutible que el propio alcalde tuvo que salir a pedir perdón a los vecinos. Relacionada: tinyurl.com/ydbhc5op
El cruceiro de la villa de Melide (A Coruña) está datado en el siglo XIV y es considerado como el más antiguo de Galicia, en las inmediaciones de Santiago de Compostela. Lo malo del monumento es que cada año “estorba” para la colocación del escenario durante las fiestas de San Roque, santo de gran devoción en Galicia. Este año, el ayuntamiento decidió hacer de la necesidad virtud y utilizar el mamotreto como anclaje del escenario en el que tocó la Orquesta Panorama como mágico fin de fiesta en las festividades.
Hace 90 años que nació Félix Rodríguez de la Fuente, sin duda el naturalista que más ha influido en la sociedad española gracias al altavoz de la televisión. También hace 38 años que murió, en Alaska, a donde se había desplazado junto al equipo de El Hombre y la Tierra para grabar la Iditarod, la carrera de trineos de perros que recorre la tierra que le había obsesionado desde adolescente.
El alcalde de Navalcarnero, en Madrid, ha llenado el pueblo de carísimas cruces gallegas. Dice que el pueblo se encuentra en un cruce de caminos y que todas esas cruces ayudan a decorar. El problema está en lo que se ha gastado, según la oposición unos diez millones de euros, cuando la deuda del Ayuntamiento asciende a 80. Y los vecinos se quejan de constantes subidas de impuestos.
Muchas cosas me sorprendieron al momento de conocer Galicia, su gente, sus montes, su mar, su verde profundamente verde, su historia, y por supuesto, su magia. Terra Mega, le dicen, y vaya que es así.