Aunque tiempo atrás las gentes de estas tierras, quien más quien menos, todos pasaban sus estrecheces, siempre fueron solidarias con aquellos desvalidos que por sus limitaciones físicas o sus enfermedades crónicas vivían en la miseria, clasificados como “pobres de solemnidad”. Estos pobres iban de pueblo en pueblo con su saco a la espalda y provistos de un cayado para espantar a los perros. Al llegar a la puerta de una casa la golpeaban con la cachaba y decían: -Ave María Purísima. -Sin pecado concebida –le respondían desde dentro.

También a los medios de comunicación ha llegado la confusión. Sin ir más lejos, la página web de La Sexta publicaba este jueves dos artículos hablando sobre el palo de golf, ambos en referencia al vídeo viralizado y en el que el objeto, en realidad, es un cepillo de barrer.

Las críticas en las redes sociales a las protestas contra el Gobierno en la calle Núñez de Balboa, se han centrado en un individuo que golpeó una señal de tráfico con un supuesto palo de golf. Le han bautizado a este individuo como 'El Pijo Manteca' (en referencia al mítico Cojo Manteca que en las manifestaciones estudiantiles de los años 80 utilizaba una muleta -le faltaba una pierna- para destrozar el mobiliario urbano). Pablo Echenique se ha hecho eco del fake "manifestaciones de la clase alta, golpeando señales de tráfico con palos de golf"

Los palos tallados (tally sticks) fueron utilizados en la Inglaterra medieval como instrumentos para documentar el pago de impuestos: se tallaban diferentes marcas según la cantidad pagada y luego eran divididos, quedando una parte en la administración como forma de contralor y la otra entregada al contribuyente como comprobante de pago. Luego de estar en uso por más de 600 años, en 1834 se ordenó quemar los palos archivados en una hoguera en el Palacio de Westminster, pero el fuego se salió de control incendiando el edificio.

Palo mallorquín para combatir el coronavirus. La propuesta realizada por el doctor Miquel Timoner se basa en el contenido de quinina del tradicional licor mallorquín.

El ‘selfie’ forma parte ya de nuestro patrimonio digital. Lo que comenzó siendo un autorretrato frente al espejo para deleite propio o un intento por capturar nuestra imagen sin ayuda de un tercero, se ha convertido en una costumbre tecnológica y va camino de establecerse como el recordatorio narcisista por excelencia para marcar territorio en las redes sociales.

Dejó aparcada la música a principios de 2019 por sus problemas de salud y regresa ahora con un anuncio en redes sociales y con un tema grabado en el balcón de su casa.

"Eu non me quedo na casa, vou á praia", dice el vecino de Ordes en la pieza que compartió en sus redes sociales. En otra publicación explica que era una forma de reclamar mejoras laborales en el sector de los transportistas

¿Te has preguntado alguna vez cuándo nos volvimos tan egocéntricos como para hacernos fotos a nosotros mismos? Pues quizá te sorprenda saber que en realidad el fenómeno del selfi, autofoto, autorretrato o como lo quieras llamar es mucho más antiguo de lo que parece.

España es el cuarto país del mundo con más muertes por selfies, según un informe de eStudio 34, una agencia de marketing digital experta en el sector. En concreto, entre 2014 y 2018 perdieron la vida 50 personas, lo que nos sitúa en las cifras más negras sólo superadas por los fallecidos en Estados Unidos, Indica y Rusia.

Un niña de 14 años, Luna S., murió el sábado por tarde al caerse de la azotea de un edificio del número 74 de la calle de Agastia en el distrito de Ciudad Lineal al hacerse un selfie.

Dos hermanos de origen alemán y de 28 y 40 años fallecieron en la tarde de ayer después de que una ola les arrastrara en la playa de Aguas Verdes, en el municipio majorero de Betancuria, cuando se disponían a realizarse un selfi. La esposa de uno de ellos, de 36 años, pudo alcanzar la costa, aunque fue evacuada al Hospital General de Fuerteventura con varios traumatismos de diversa consideración. Este es el segundo caso de turistas que mueren haciéndose un 'selfie'' en este mismo punto de la costa de Fuerteventura.

Un espejo y un Molt Honorable.

El típico selfie sonriente del eurodiputado de Podemos Miguel Urbán y María Eugenia Palop se ha hecho viral en las redes sociales, pero no por ellos, sino por el expresidente José María Aznar, que casualidad o no, aparecía detrás de ellos. La presencia del exdirigente popular ha llamado la atención de los tuiteros por la mirada que dedica a los eurodiputados. "Unos ojos que se te clavan", como lo ha definido Urbán. Urbán, que pertenece a la corriente Anticapitalista de Podemos, ha compartido la foto en Twitter.

Usar un cámara de casi un kilo y medio de peso y más de 5000 euros para hacerse selfies es, a priori, una soberana estupidez. A no ser, claro, que seas una astronauta de la Estación Espacial Internacional y este sea el equipo fotográfico que usas para todo. También, para algún que otro autorretrato durante tus paseos espaciales.

La mujer, sonriente, no duda en fotografiar a su marido, tendido en el suelo de la sala de parto rodeado de tres sanitarios. La foto se ha hecho viral.

Yo no fui un fotógrafo de la movida, fui un gran actor de la época", sonríe el fotógrafo español Alberto García-Alix, quien se hizo famoso precisamente por retratar aquel movimiento cultural madrileño. ¿Por qué casi toda su obra está en blanco y negro? ¿Qué le atrae de la fotografía analógica? ¿Por qué con los años se hace cada vez menos autorretratos? Véanlo en Entrevista.

Madalyn Davis, una modelo e influencer de 21 años, ha muerto después de caer por un acantilado de 30 metros de altura mientras intentaba hacerse un selfie sentada al borde de un precipicio en Sydney (Australia).

Noah Kalina es un fotógrafo neoyorquino que lleva 20 años haciéndose el mismo selfie todos los días de su vida. El proyecto Everyday fue uno de los primeros virales de YouTube allá por 2006, cuando Kalina acumulaba seis años de fotos. El neoyorquino tomó la primera imagen el 11 de enero de 2000, por lo que era imperativo que volviera a YouTube ahora que el proyecto cumple dos décadas.

En mayo de 2014, una aeronave Cessna 150 despegaba del aeropuerto Front Range cerca de Aurora para realizar un vuelo recreativo, pero una foto cambiaría su destino.

Universal Sans es una curiosa tipografía medio experimental, medio práctica, medio artística completamente personalizable. Esto quiere decir que se puede elegir el grosor, la forma exacta de los remates, algunas formas alternativas de las letras y otros detalles, completamente «paso a paso». El resultado está dentro del tipo de letra de palo Helvética/Univers pero con matices al gusto de cada cual. [Vía Microsiervos]

No puede ser casualidad que esta última década haya coincidido con la peor crisis económica y con la explosión de la corrupción con el fin del bipartidismo. Los ERE y la Gürtel empezaron siendo cuatro golfos y dos trajes. Luego llegaron las tarjetas 'black' y los papeles de Bárcenas. Los billetes para asar una vaca y el Jaguar en el garaje. Y todo esto hubo que tragárselo en los años de la austeridad que ahora Mariano Rajoy comenta echándose unas risas en El Hormiguero. Y todavía habrá quién se pregunte cuándo empezó la crisis del sistema.

Si alguien tiene 19 hermanos reconocidos (fuera del matrimonio no sabe cuántos) y sus padres están a punto de morir, la posibilidad de recibir algo sustancioso de herencia es bastante escasa. De ese escenario, con solo 14 años, escapó Pedro Menéndez, que a los 19 años compró un patache (un barco ligero y rápido) para comenzar una prometedora carrera de pirata en aguas del Atlántico, donde el flujo de personas y riquezas en el siglo XVI hacía pensar que los abordajes eran una forma de ganarse la vida más segura.

Leo en la prensa que hay una empresa británica dispuesta a pagar más de cien mil euros a la persona que ceda los derechos de su rostro para crear un robot que sería su viva imagen. Me sorprendo sobre todo por la cifra, porque a estas alturas uno pensaba que un rostro no valía nada. Veo por la calle a esas personas que en tres minutos se han hecho diez selfies, y entonces me pregunto lo devaluado que tiene que estar en su mente –y no digamos para los demás– su rostro, esa maravilla natural que es privilegio de originalidad.