La chica de los cinco dedos rotos ya no podrá ser el icono de los incidentes entre los ciudadanos y las fuerzas de seguridad durante el referéndum ilegal del 1-O. Marta Torrecillas Domènech (33 años) denunció a la Policía porque, mientras la sacaban a la fuerza de un colegio electoral, un agente le había roto "los dedos uno a uno". Pero 24 horas más tarde, y tras haberse viralizado su caso, Marta admitió que sólo sufría una capsulitis, es decir, una inflamación, en uno de sus dedos. Marta es activista de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC).