Las autoridades de Protección de Datos de la Unión Europea, entre las que se encuentra la Agencia Española de Protección de Datos, firmaron el 16 de junio de 2015 el primer dictamen conjunto sobre drones para alertar de sus posibles riesgos, como por ejemplo que puedan violar la privacidad y la seguridad de datos personales dada la capacidad de estos aparatos para recoger y procesar informaciones como imágenes, sonidos o datos de geolocalización.