Un devoto cristiano asegura que un accidente laboral le aumentó la líbido, lo que le hizo recurrir a prostitutas y pornografía. Stephen Tame, de 29 años, sufrió heridas graves en la cabeza en una caída, y obtuvo el pasado diciembre una indemnización de más de 3 millones de libras en daños (4,5 millones de euros) porque el golpe le transformó de leal esposo recién casado a “desinhibido” con líos de faldas.