El ya exvicealcalde de Lorca, Francisco Morales, de Cs, cesado de sus funciones este viernes por el alcalde de Lorca, Diego José Mateos, por presuntas irregularidades en la organización de un evento, continúa atrincherado en su despacho del Ayuntamiento entre un fuerte dispositivo policial compuesto por agentes de la Policía Nacional y Local. Francisco Morales asegura haber sufrido una crisis de ansiedad, motivo por el que han acudido los servicios de emergencia. Fuentes municipales confirmaron que Morales se niega a abandonar el Consistorio.

La dejó inconsciente tras una paliza y, al creer que estaba muerta, huyó a Almería: este miércoles se celebrará su juicio, pese a la huelga de letrados.

«Este año se ha hecho muy largo. Estamos cansados, agotados… con ganas de que todo esto termine. Vivimos en una constante incertidumbre que parece que nunca va a terminar», afirma en declaraciones a La Opinión el presidente de la Cooperativa de Ganaderos de Gestión Medioambiental de Purines (Gesalor), Francisco Román. Agentes de la Policía insistían esta misma semana en que lo que ocurrió fue algo «espontáneo» y «nunca premeditado», mientras que la hipótesis del ‘plan preconcebido’ va perdiendo fuerza

El pasado viernes a las 18.30h de la tarde dos concejales de Vox y cinco del PP se reunieron en un restaurante a las afueras de Lorca con los organizadores de la manifestación que terminó con el asalto al pleno municipal