"Con los dedos se llega a partes del interior de la nariz que no se puede llegar con un pañuelo y de esta manera, se mantiene el interior de la fosa nasal limpio". La nariz funciona como un filtro donde se concentran las bacterias que, con el aire, intentan entrar en nuestros pulmones."Cuando nos comemos el moco, éste funciona como una especie de vacuna", dijo el médico austriaco Friedrich Bischinger, un conocido y famoso neumólogo.