La UDEF informa de irregularidades en la concesión de ayudas entre la Junta de Andalucía y la empresa Santana Motor en 2010. Según los agentes, al Administración concedió 36 millones de euros a la empresa jienense para un nuevo modelo de todoterrreno, un vehículo que nunca llegó a fabricarse. Además, tampoco se devolvió esa subvención y la fábrica pese a todo acabó cerrando sus puertas.
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