Los investigadores del MIT han descubierto que una capa ultrafina de óxido de aluminio, aunque sólida, puede deformarse como si fuera un líquido, llenando cualquier grieta y espacio a medida que se forman. La fina capa de recubrimiento debería ser especialmente útil para evitar la filtración de moléculas diminutas que pueden penetrar a través de la mayoría de los materiales, como el gas hidrógeno que podría usarse para alimentar automóviles con pilas de combustible o el tritio radioactivo que se forma en el interior de las plantas nucleares.
|
etiquetas: óxido , metálico , autorregeneración , corrosión