En 1923, cuando ya había echado el cierre, Ricardo Baroja recordó la importancia del Café de Levante, uno de los lugares más célebres para una generación gloriosa de escritores y poetas, filósofos y bohemios: «Muchas veces Valle-Inclán ha dicho: “El Café de Levante ha tenido más influencia en el arte y la literatura contemporánea que un par de Universidades y Academias”. Si se estamparan aquí los nombres que se sentaron en nuestro rincón quizás los lectores de La Pluma dieran la razón a Valle-Inclán». La lista es larguísima.
|
etiquetas: mateo morral , café levante