Hubo un tiempo en el que la obra pública se consideraba un motor para la economía, y los ayuntamientos y diputaciones de todo el mundo, sin que las instituciones vascas fueran una excepción, licitaban obras, ya fueran estadios deportivos, ya fueran carreteras o ya fuera infraestructuras portuarias que se adjudicaban al mejor postor.
|
etiquetas: obra publica , accidentes laborales , subcontratacion , desproteccion