La fiebre se produce gracias a medidadores inflamatorios como la interleuquina 1, 8 y el TNF (factor de necrosis tumoral) y es un mecanismo de defensa del organismo que ayuda a nuestro sistema inmune a funcionar mejor. Aunque los antipiréticos no han demostrados recrudecer las infecciones sí que han demostrado prolongar el tiempo de excreción de bacterias así como se ha demostrado en humanos que la fiebre ayuda a resolver las infecciones más rápido. En un experimento con lagartos infectados por Aeromonas, el 75% murió a 38°C y el 0% a 42°C (..)
|
etiquetas: fiebre , infección , inmunidad