El Estado ingresó en 2018 un total de 208.685 millones de euros a través de los impuestos, un 7,6% más que en 2017 pero 5.000 millones por debajo de la recaudación tributaria de 2007. El 85% de esa recaudación procede del IRPF, que supuso un 39% del total de impuestos del año pasado; el IVA, un 33%; y el impuesto de Sociedades, que aportó un 12%. Tanto el IRPF como el IVA superan los niveles de recaudación de la crisis, mientras que el impuesto de Sociedades no consigue recuperarse pese al aumento de los beneficios empresariales
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