El monasterio de Santa María de Rioseco (Burgos) fue donado a la Iglesia a condición de que lo conservara, pero fue abandonado y ahora se recupera con dinero público y voluntariado...... Cada vez más miradas se vuelven sobre el Arzobispado de Burgos, propietario único del monasterio y beneficiario en la sombra del trabajo de los voluntarios y de las subvenciones. De hecho, no ha invertido un solo euro en gasto directo en 10 años. Pero en 2008 acudió al Registro de la Propiedad a inmatricular la finca a nombre del obispo.
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