Un hallazgo casual destapó la fascinante diversidad de anélidos marinos que esconde el sistema de cuevas costeras de la isla de Mallorca. La nueva especie, Pollentia perezi, no se parece a ninguna otra descrita hasta la fecha en ninguna parte del mundo. Su ADN reveló que sus parientes más cercanos viven en un abismo del océano Pacifico y en la plataforma continental de la Antártida, lo cual la convierte en un “fósil viviente”, miembro de una estirpe poco diversa propia ambientes fríos y oscuros.