Hace cuatro siglos al ingenioso Charles Le Brun se le ocurre estudiar las “pasiones animales” del ser humano en una serie dilatada en el tiempo de estudios en los que transforma una figura humana en diversos tipos de animal.

Face morphing se ha vuelto bastante popular en los últimos años; desde mezclar las caras de dos celebridades hasta adivinar cómo podría verse su bebé, muchos programas de televisión y aplicaciones usan software que cambia una cara a otra a través de una transición continua y sin problemas.

Que la realidad aumentada tiene un gran potencial en ámbitos diversos es una realidad real, sin aumentar, valga la redundancia. Para los neófitos, apuntaremos que "realidad aumentada" es el término con el que se define la visualización de elementos físicos del mundo real, complementados con elementos virtuales que aportan información extra, de forma que se crea una realidad "mixta", en tiempo real, delante de nuestros ojos.

Una empresa llamada Illusio que se dedica a la cirugía plástica está empleando software especial que mediante técnicas de morphing(combinación suave de imágenes) y realidad aumentada (imágenes virtuales sobre imágenes reales) permite hacerse una idea de cuál sería el aspecto de las pacientes tras una operación de aumento de pecho.

La prenda está impresa con bacterias que reaccionan al calor corporal.