Era el 11 de diciembre de 1981 y, en la mañana, iba a visitar a su madre, que vivía más abajo, en la hondonada de La Joya, una aldea perdida en los confines de El Salvador.

la política de la guerra en El Salvador, solo ha sido un juego, una burla y un insulto para El Salvador, tanto los dirigentes de ARENA como el FMLN en un acto de dignidad deben de pedir perdón de rodillas a sus votantes dar un paso atrás y dejar que las nuevas generaciones, pero ojo no cualquiera de los que dicen ser nuevas generaciones, los que de verdad están preparados y con voluntad de servir y no hacerse de los pocos bienes que le quedan al pueblo...