Lo que podría interpretarse como un simple 'error de imprenta' también puede ser un micromachismo encubierto, ya que en lugar de destacar a Mary Shelley en rojo se prioriza el nombre de la novela.

El superior de Berta pensó en ella y no en sus compañeros para "ayudar" a la encargada de la limpieza, que era en realidad la administrativa y que había pedido que contrataran a alguien para asumir la tarea extra.

El Micromachismo es un comportamiento manipulativo que inducen a la mujer a comportarse de un modo que perpetúa sus roles tradicionales de género sin darse cuenta. ¿Está nuestra sociedad rodeada de estas situaciones?

No queremos tener que ser valientes volviendo a casa por las noches; no queremos que nadie nos tenga que proteger. “El piropo es un micromachismo que está en la base de la pirámide de la violencia, esa en cuya cima se acaba matando. Es un machismo indirecto, escondido, buenista, suave, que parece que no daña… Es aquel que, bajo el mensaje del amor romántico, permite la invasión“.

Decidimos ir a una de esas ‘cadenas’ dónde encuentras de todo para montar fiestas infantiles o temáticas. Seguimos las indicaciones que nos llevaban hacia el fondo de la tienda, lugar donde nos encontramos con los disfraces para adultos y para niños (incluídos bebés) ¿Desde cuándo las jirafas van con minifalda, tacones y posan con la ‘cintura rota’? ¿Desde cuándo las mariquitas usan escotes de vértigo?

Todas las historias están basadas en experiencias que nos han llegado al blog Micromachismos, que cumple dos años.

Ya la división por categorías despierta cierto recelo al distinguir entre "general, mujeres y niños", entendiéndose que "general" debe ser la categoría para hombres y marcando así una nueva restricción de género mucho más atrevida de lo conocido hasta ahora. También la cuota de inscripción coloca a la mujer junto a los niños y un escalón por debajo de los hombres. Pero es en la enumeración de premios a cada categoría donde los estereotipos quedan claramente señalados.

"Hace tres meses empecé a trabajar de camarera en Berlín y hay detalles que a mí me molestan", cuenta Carla.