"I Like to Watch" es un vídeo musical de cuatro minutos que explora las conexiones entre los ataques del 11 de septiembre, los deportes profesionales y la pornografía. Es a menudo entendido como una crítica del voyeurismo inherente a los mass media, pero no era esa la intención original. El vídeo simplemente intenta capturar la experiencia personal del autor al ver los ataques en televisión, incluyendo el regocijo pueril, el afán de venganza, la fascinación perversa y la excitación sexual.