Hace unos días, me pidieron unas palabras sobre García Márquez y su obra. Yo creo que sí era un gran burgués, que amaba el caviar, el champán y la langosta. No era un burgués en el sentido marxista del término, pues no era propietario de los medios de producción, pero sí en un sentido más moderno y convencional. Amaba el lujo y se relacionaba con los poderosos de la tierra.