Es cierto que de los evangelios puede cosecharse una visión de Jesús y de su enseñanza de carácter altamente humano y positivo. Puede decirse incluso que la mayor parte del texto puede cobijarse bajo la sombra del humanitarismo. Ahora bien, los documentos primordiales cristianos son altamente complejos y contradictorios. Si la mayoría de líneas parecen escritas por Dios, no faltan las que parecen incrustadas por el diablo, al igual que los famosos versículos satánicos del Corán. En el nuevo testamento halla justificación Francisco de Asís, pero también la inquisición. En el Corán halla justificación la mística sufí, pero también la yihad.
Jesús, el galileo armado. José Montserrat Torrens