Israel no deja de sorprender a los arqueólogos. Después de la exploración en una cueva funeraria intacta de Tel Aviv, las piezas de cerámica que estaban dentro del sitio revelaron lo que contenían. Una de esas sustancias era el opio, la evidencia más antigua del consumo de esta la droga hasta la fecha, que es de al menos 3,300 años de antigüedad.

Un nuevo estudio realizado por la Autoridad de Antigüedades de Israel, la Universidad de Tel Aviv y el Instituto Weizmann de Ciencias ha revelado las primeras pruebas conocidas del uso del opio, y de las drogas psicoactivas en general, en el mundo. Los residuos de opio se encontraron en vasijas de cerámica descubiertas en Tel Yehud, en una excavación dirigida por Eriola Jakoel en nombre de la Autoridad de Antigüedades.

Un nuevo estudio en el Journal of General Internal Medicine , publicado por Springer, muestra que la prescripción de opiáceos ha disminuido después de un pico en 2012. La autora principal Katherine Hadlandsmyth del Sistema de Atención Médica VA de Iowa City y la Universidad de Iowa notaron además que la disminución se debió principalmente a la disminución de la prescripción de opiáceos a largo plazo, que conlleva un riesgo mucho mayor de efectos secundarios dañinos, adicción y sobredosis, en relación con la prescripción a corto plazo. En contra