Thomas Anderson, Neo, se levantaba todos los días para ir a trabajar al mismo lugar, tenía las mismas conversaciones con los compañeros de trabajo y amigos y trataba de deslizarse por la vida como, a fin de cuentas, hacemos todos. Pero un día, un extraño sujeto le ofrece abrir los ojos, con dolor como si de un alumbramiento se tratase, y salir de aquella simulación o seguir como estaba, en su lugar de confort.