Una mujer se hizo un TAC por otro motivo. Los médicos, sorprendidos, vieron en las imágenes una aguja en el cerebro. No es la primera vez que se detecta algo así. Hay varios casos en la literatura científica en los que se describe la presencia de una aguja en el cerebro de una persona, normalmente anciana. Se debe a que, en algunos lugares del mundo, en épocas de hambruna en las que sería imposible mantener a un bebé, era relativamente habitual intentar acabar con sus vidas insertando una aguja en las fontanelas.