Unos neurocientíficos han aumentado con éxito la motivación para esforzarse mentalmente mediante el uso de una corriente eléctrica alterna débil (tACS) enviada a través de electrodos fijados al cuero cabelludo para sincronizar las ondas cerebrales. Los hallazgos, publicados en "Cognitive, Affective, & Behavioral Neuroscience", ayudan a identificar los mecanismos neuronales subyacentes a la disposición a participar en esfuerzos mentales, sugiriendo que las oscilaciones theta en el centro frontal medio desempeñan un papel clave.