Investigadores de la Universidad de Copenhague han utilizado luz y cloro para erradicar del aire metano en baja concentración, lo que acerca a la posibilidad de eliminar los gases de efecto invernadero de las naves ganaderas, las plantas de producción de biogás y las depuradoras de aguas residuales en beneficio del clima. En la atmósfera el metano tarda 12 años en descomponerse. "Podemos desencadenar una reacción y descomponer el metano aproximadamente 100 millones de veces más rápido que en la naturaleza", explica Matthew Stanley Johnson