Unos científicos han comprobado que un fármaco, por ahora solo experimental, cuya única utilidad se suponía que sería como terapia contra el cáncer y que es capaz de penetrar en el cerebro, puede fomentar la regeneración de los nervios dañados tras una lesión.
"Nuestros resultados muestran una notable recuperación de las funciones sensoriales y motoras, siendo los animales tratados con AZD1390 indistinguibles de los no lesionados a las 4 semanas después de la lesión", destaca Ahmed.