En 2011, un coleccionista compró en Marruecos un curioso meteorito oscuro de 320 gramos. Esta roca estaba hecha del tipo de minerales que se forman cuando una masa de magma o lava se enfría, así que debía provenir de un mundo diferenciado. O, lo que es lo mismo, de un cuerpo celeste lo bastante grande como para que su propia gravedad separase su interior en un núcleo metálico denso y un manto rocoso más ligero. Este meteorito ígneo fue bautizado como North West Africa (NWA) 7034 y su análisis químico e isotópico reveló que provenía de Marte.